SYDNEY, Australia (AP) — Un hombre australiano que en enero fue declarado culpable de matar a un estudiante de doctorado estadounidense gay hace más de tres décadas empujándolo por un precipicio recibió el martes una sentencia de 12 años.
En 1988, el estadounidense Scott Johnson, de 27 años, era un estudiante de posgrado en matemáticas que se había mudado a Australia para estar con su pareja. El 8 de diciembre de ese año, Johnson conoció a un hombre australiano, Scott White, en un pub en Sydney, y los dos fueron a un acantilado abierto frecuentado por hombres homosexuales. El cuerpo del Sr. Johnson fue descubierto en el fondo del acantilado dos días después.
La investigación original sobre la muerte del Sr. Johnson dictaminó que se trató de un suicidio.
Su hermano Steve se mostró escéptico. Después de enterarse de una investigación de 2005 sobre la muerte de tres hombres del mismo período en circunstancias similares, contrató a un periodista de investigación para investigar la muerte de su hermano.
Ex funcionarios australianos han dicho que la policía en ese momento a menudo era hostil hacia los hombres homosexuales y no investigaba adecuadamente sus muertes.
Steve Johnson solicitó con éxito una segunda investigación en 2012, que anuló el fallo de suicidio y recomendó que la policía volviera a investigar el caso.
Se llevó a cabo una tercera investigación en 2017, que concluyó que el Sr. Johnson fue víctima de un crimen de odio contra los homosexuales y cayó por el precipicio como resultado de violencia real o amenaza. Después de una investigación de tres años por parte de la policía de Nueva Gales del Sur, el Sr. White fue acusado de asesinato en mayo de 2020.
El Sr. White originalmente se declaró inocente, pero en enero cambió inesperadamente su declaración.
La jueza Helen Wilson, jueza de la Corte Suprema en el estado de Nueva Gales del Sur que pronunció la sentencia, dijo que tuvo en cuenta una serie de factores. Entre ellos: las circunstancias personales del Sr. White, incluido el hecho de que posteriormente había sido respetuoso de la ley y tenía problemas cognitivos.
El Sr. White, de 51 años, deberá pasar al menos ocho años y tres meses en la cárcel antes de ser elegible para la libertad condicional.
Muchos miembros de la familia de la víctima asistieron personalmente a la sentencia. Steve Johnson, un emprendedor tecnológico que pasó décadas llamando la atención sobre la muerte de su hermano, dijo que les dio paz.
“Creo que ahora todos podemos sentir que hemos llegado a una conclusión: el asesino de mi hermano está tras las rejas durante mucho tiempo”, dijo.
Entre 1970 y 2010, al menos 88 miembros de la comunidad gay fueron asesinados por varias pandillas locales. Las investigaciones policiales sobre estas muertes continúan, y en noviembre pasado el gobierno de Nueva Gales del Sur anunció una investigación sobre ellas, cuyos detalles se anunciarán en breve.
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