El rector encargado de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), Robespierre Lizárraga, solicitó una reunión urgente al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), para abordar la reforma a diversas leyes de educación estatal que “violan la autonomía y soberanía de la UAS”.
Mediante una carta entregada este viernes en Palacio Nacional, el rector en funciones dijo que buscan la ayuda de AMLO “de forma desesperada” ante la decisión del Congreso de Sinaloa de sesionar de forma extraordinaria para reformar la Ley Orgánica de la Universidad “e imponer su agenda”.
Desde el año 2022, la directiva de la UAS de la mano del asesinado ex rector Héctor Melesio Cuén Ojeda entró en conflicto con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, por el control político y financiero de la universidad, sin que el gobierno estatal haya podido debilitar al grupo político cercano a Cuén Ojeda.
Por lo anterior, Rocha Moya propuso reformas para evitar que el Rector de la UAS sea elegido por votación del Consejo Universitario, método que es muy similar al que se aplica en la UNAM, abriendo el proceso a los estudiantes, como sucedía antes de la reforma que dio el poder dentro de la universidad al extinto Héctor Melesio Cuén.
A la par, la Fiscalía de Sinaloa ha iniciado decenas de carpetas de investigación contra altos funcionarios y el exrector de la UAS, Jesús Madueña Molina, por el presunto desvío de recursos públicos, pero la universidad se ha defendido con amparos señalando que el gobierno del estado carece de facultades para auditar y vigilar el uso de recursos públicos dentro de la institución.
Por lo anterior, el Rector Encargado, Robespierre Lizárraga advirtió que este viernes el Congreso de Sinaloa programó una sesión para aprobar una nueva Ley Orgánica de la UAS y de esa forma “imponernos una agenda y desestabilizar la institución, razón por la que, respetuosamente, reiteramos nuestra solicitud de su respaldo y acompañamiento”.
La misiva agrega que la UAS quiere recuperar el espíritu de la Ley “que usted promovió y que hicimos nuestra en cada uno de sus principios”, destacando que la propuesta del gobierno de Rocha ya había sido declarada inconstitucional por el Poder Judicial de la Federación.
Sin escuchar razón alguna o consultar a las autoridades universitarias, estudiantes ni mucho menos al Consejo Universitario, el Congreso del Estado ha dado inicio para reformar la Ley Orgánica de la Universidad, proceso que transgrede nuestra Carta Magna y la Ley General de Educación Superior.
Agrega que la citada reforma “es un reiterado ataque a la autonomía universitaria” y que la modificación del marco jurídico que regula la vida interna de la universidad por parte de los diputados del Congreso local de Sinaloa “es una ilegalidad”.
“Consideramos que las y los legisladores deberían atender, con sentido de urgencia, los problemas de gobernabilidad que existen en la entidad y no estar atentando contra una casa de estudios que brinda cobertura universal, sumamente accesible para la juventud”, finaliza la carta.
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