NANTES – Las autoridades francesas detuvieron y presentaron cargos este domingo contra un hombre que admitió a investigadores que fue él quien provocó el incendio que causó graves daños en una importante catedral gótica del siglo XV.
El hombre, que era voluntario en la iglesia, ya había sido interrogado y puesto en libertad tras el fuego del 18 de julio, que destruyó el órgano, reventó vidrieras y tiñó de negro el interior de la catedral de San Pedro y San Pablo en la ciudad de Nantes.
Detenido de nuevo este fin de semana con motivos de un segundo interrogatorio, el trabajador terminó reconociendo su responsabilidad por el suceso, indicó su abogado, Quentin Chabert.
“Confesó las acusaciones en su contra, que, como indicó el fiscal, son causar destrucción y daños por fuego”, dijo el abogado a la radio France Info. “Lamenta los hechos. Eso es cierto. Es una especie de arrepentimiento”.
Medios franceses citaron al fiscal de Nantes indicando que el hombre ruandés de 39 años, al que se había encargado la tarea de cerrar la catedral, admitió al juez que había encendido tres fuegos: en dos órganos de la catedral y en un cuadro eléctrico. Se desconocían sus motivaciones.
El delito de incendio provocado puede recibir una sentencia mayor de 10 años de cárcel y una multa de 150,000 euros (175,000 dólares), según declaraciones del fiscal citadas por medios.
Colombia.
El hombre, que fue detenido inmediatamente después del incendio, retenido un día y después puesto en libertad, volvió a ser detenido el sábado por la mañana siguiendo pruebas reunidas por expertos de la policía forense y un equipo de 20 investigadores que interrogaron a más de 30 personas, indicó la fiscalía en un comunicado.
La catedral fue construida durante cinco siglos y completada en 1891. Su órgano principal, fechado en el siglo XVII y conocido como “el alma de la catedral”, había sobrevivido a un incendio grave en 1972.
El incendio reavivo en Francia el doloroso recuerdo por el que se produjo hace solo 15 meses en Notre Dame de París, aunque esta vez fue controlado rápidamente y mucho menos destructivo.
El ejército fue convocado en una remota región de Siberia, donde ardía un pozo de petróleo.