“Esperemos que de aquí a septiembre no se coopte (el poder legislativo)”, comentó.
La Comisión de Salud de la Cámara de Diputados aprobó el miércoles una reforma a la Ley General de Salud, para obligar a las empresas a incluir un etiquetado frontal en sus alimentos y bebidas no alcohólicas que adviertan al consumidor su contenido de sodio, azúcares, grasas, grasas saturadas e ingredientes que sean factor de riesgo de enfermedades crónicas no transmisibles, lo que el director del Poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, consideró como una buena señal.
La medida se aprobó, a pesar de que la industria de alimentos y bebidas envió 20 cartas a la comisión y de que el PAN presionó para retrasar la discusión. Con los cambios se busca que la información, independiente de la etiqueta con los ingredientes de cada producto, permita a los consumidores de manera consciente decidir si consumen esos productos.
El dictamen aprobado por 24 votos a favor y dos abstenciones del PAN, explica que el etiquetado frontal de advertencia en alimentos y bebidas no alcohólicas constituye la única fuente de información de los consumidores.
Calvillo adelantó en #AristeguiEnVivo que “esto va a pasar al pleno en septiembre y lo que vamos a ver es algo muy intenso, por el nivel de cabildeo de la industria”.
“Esperemos que de aquí a septiembre no se coopte (el poder legislativo)” ante la industria, refirió.
“Hay un derecho de los consumidores a la información… hay una relación directa entre mayor consumo de estos productos y mayor incidencia de obesidad y diabetes y hay una necesidad (de información) cuando un producto es alto en azúcar, grasa y sal… durante años la gente no sabía cuánto azúcar estaba consumiendo en una bebida… este derecho a la información en un país en el que vivimos una emergencia epidemiológica es el derecho más básico“, sostuvo.