En agosto de 2021, en medio del caos en el aeropuerto de Kabul ante el regreso de los talibanes a Afganistán, las imágenes de un bebé siendo entregado a un soldado a través de la barda dieron la vuelta al mundo.
Cinco meses después, el niño fue localizado y entregado a sus familiares en Kabul el pasado sábado, tras siete semanas de suplicas y negociaciones en las que tuvo que intervenir la policía talibán.
Sohail Ahmadi, de ahora 7 meses, fue encontrado por un taxista de 29 años llamado Hamid Safi en el aeropuerto de Kabul en agosto pasado y lo llevó a su casa para criarlo como propio.
Safi dijo que encontró a Sohail solo y llorando en el suelo. Después de que trató, sin éxito, de ubicar a los padres del bebé lo llevó a casa con su esposa e hijas. Safi tiene tres hijas propias y dijo que el mayor deseo de su madre antes de morir era que él tuviera un hijo.
Esposa de Hamid Safi alimentando a Sohail Ahmadi | Foto: Reuters
En entrevista con Reuters, el hombre explicó que llevaron al bebé al médico para un chequeo después de que lo encontraron y rápidamente incorporó al niño a su familia. Llamaron al bebé Mohammad Abed y publicaron fotos de todos los niños juntos en su página de Facebook.
Dichas fotos ayudaron a los familiares del bebé a identificarlo. El padre del menor, ahora en Estados Unidos, pidió a sus familiares que aún están en Afganistán, incluido su suegro Mohammad Qasem Razawi, de 67 años, que vive en la provincia nororiental de Badakhshan, que busquen a Safi y le pidan que devuelva a Sohail a la familia.
Solo en el aeropuerto
El bebé, Sohail Ahmadi, tenía solo dos meses cuando desapareció el 19 de agosto en medio de la multitud de personas que intentaban salir de Afganistán. Mirza Ali Ahmadi, padre del niño, trabajó como guardia de seguridad de la embajada de EU en Kabul, y se encontraba junto con su esposa Suraya y sus cuatros hijos en el lugar intentando ingresar el aeropuerto para tomar un vuelo a Estados Unidos.
Ante la desesperación, Mirza y Suraya temieron que la multitud aplastara al bebé por lo que entregaron a Sohail por encima del muro del aeropuerto a un soldado uniformado que creía que era estadounidense, con la esperanza de encontrarse con él una vez que pudieran ingresar al aeropuerto.
El pequeó Sohail Ahmadi siendo entregado a su abuelo Mohammad Qasem Razawi | Foto: Reuters
Sin embargo, pasaron más de 30 minutos para que la familia pudiera ingresar al lugar y cuando lo hicieron, no lograron localizar al bebé por ningún lado. Ahmadi dijo que buscó desesperadamente a su hijo dentro del aeropuerto y los funcionarios le dijeron que probablemente lo habían sacado del país por separado y que podrían reunirse con ellos más tarde.
El resto de la familia fue evacuada y eventualmente terminó en una base militar en Texas. Durante meses no supieron dónde estaba su hijo.
El caso destaca la difícil situación de muchos padres separados de sus hijos durante el apresurado esfuerzo de evacuación y la retirada de las fuerzas estadounidenses del país después de una guerra de 20 años.
De regreso con su familia
Mohammad Qasem Razawi, abuelo del niño, dijo que viajó dos días y dos noches a la capital con regalos, entre ellos una oveja sacrificada, varias libras de nueces y ropa, para Safi y su familia.
Pero Safi se negó a liberar a Sohail e insistió en que también quería ser evacuado de Afganistán con su familia. El hermano de Safi, quien fue evacuado a California, dijo que Safi y su familia no tienen solicitudes pendientes para ingresar a Estados Unidos.
La familia del bebé buscó ayuda de la Cruz Roja, que tiene la misión declarada de ayudar a reconectar a las personas separadas por crisis internacionales, pero dijeron que recibieron poca información de la organización. Un portavoz de la Cruz Roja dijo que no comenta sobre casos individuales.
Mohammad Qasem Razawi agradeciendo a Safi | Foto: Reuters
Finalmente, después de sentir que se habían quedado sin opciones, Razawi contactó a la policía talibán local para denunciar un secuestro. Safi dijo a Reuters que negó las acusaciones a la policía y dijo que estaba cuidando al bebé, no secuestándolo.
La denuncia fue investigada y desestimada y el comandante de la policía local dijo a Reuters que ayudó a llegar a un acuerdo, que incluía un acuerdo firmado con las huellas dactilares de ambas partes. Razawi dijo que la familia del bebé finalmente acordó compensar a Safi con alrededor de 100 mil afganos (950 dólares) por los gastos incurridos para cuidarlo durante cinco meses.
“El abuelo del bebé se quejó con nosotros y encontramos a Hamid y, con base en las pruebas que teníamos, reconocimos al bebé”, dijo Hamid Malang, el controlador de área jefe de la estación de policía local.
“Con ambos lados de acuerdo, el bebé será entregado a su abuelo”, dijo el sábado.
En presencia de la policía, y entre muchas lágrimas, el bebé finalmente fue devuelto a sus familiares.
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