Disney está viviendo unas semanas algo convulsas en cuanto a la producción de sus rodajes se refiere. Por un parte, Rogue Squadron de Patty Jenkins ha paralizado el proyecto debido a la agenda de la directora y en Marvel, Black Panther: Wakanda Forever no podrá continuar hasta que Letita Wright se recupere del hombro (y se vacune). Hace algunas semanas, desde La Casa de las Ideas volvieron a saltar las alarmas con Doctor Strange 2 un rodaje que, a priori, parecía terminado. La continuación del hechicero necesitará unas intensivas jornadas de reshoots, durante seis semanas a raíz de cinco jornadas semanales. El silencio se ha roto hace poco, cuando Benedict Cumberbatch, protagonista de la cinta, se ha pronunciado sobre la polémica.
En su defensa, hay que señalar que la pandemia ha retrasado en gran medida varios de los rodajes de este año. La secuela se estrenará el próximo 6 de mayo de 2022, cuando en un principio estaba programada para estrenarse un año antes. En unas declaraciones para Empire, Cumberbatch se pronunció por primera vez sobre los retrasos, achacando a las medidas de COVID: “Estamos en medio de nuevas grabaciones. Estamos trabajando increíblemente duro para hacer que un programa funcione para aprovechar todo el potencial de la película: partes que queremos hacer mejor, pero también partes que eran simplemente imposibles de hacer en el día debido a la logística, COVID, etc.”
El actor destacó que “todo es un poco más lento”. Doctor Strange 2, titulada oficialmente Doctor Strange y el multiverso de la locura, no es la única película que ha sufrido retrasos. La serie de Flash ha tenido que renunciar al tradicional crossover, mientras que House of Dragon (precuela de Juego de tronos) se paralizó porque un miembro del set dio positivo por COVID. La secuela de Aquaman paró porque el propio protagonista, Jason Momoa, también se vio afectado por el virus.
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