Este es primer nombramiento importante de Biden
e de si el mandatario Donald Trump acepta o no los resultados de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.
El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, nombró al asesor Ron Klain como su jefe de gabinete de la Casa Blanca, su primer nombramiento importante, a medida que construye su Administración independientemente de si el mandatario Donald Trump acepta o no los resultados de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.
Pese a los intentos de Donald Trump por impugnar los resultados de las elecciones presidenciales, el mandatario electo Joe Biden avanza con decisiones sobre su próxima Administración.
El demócrata nombró al asesor Ron Klain como su jefe de gabinete. El abogado de 59 años ya se desempeñó en ese cargo para Biden cuando este ejerció como vicepresidente de Barack Obama, que gobernó entre 2009 y 2016.
“La profunda y variada experiencia de Ron Klain y su capacidad para trabajar con personas de todo el espectro político es precisamente lo que necesito en un jefe de gabinete de la Casa Blanca, mientras enfrentamos este momento de crisis y volvemos a unir a nuestro país”, publicó el líder demócrata en su cuenta de Twitter.
En Klain, Biden ve un líder confiable y experimentado que también trabajó como el principal asistente del vicepresidente Al Gore durante la Administración de Bill Clinton. Fue asesor externo de Joe Biden durante la campaña y los dos tienen una relación que se remonta a los años del mandatario electo como senador de Estados Unidos por Delaware.
Como jefe de personal de Biden durante la crisis financiera de 2008 y 2009, Klain ayudó a supervisar la implementación de la Ley de Recuperación de 787.000 millones de dólares que impulsó a la economía estadounidense.
Klain, crítico de la gestión de Trump frente a la pandemia
Pero en Klain, el presidente electo también tiene un aliado clave en su visión sobre el manejo de la pandemia, un asunto que el demócrata ha marcado en la primera línea de su agenda de Gobierno.
El virus tiene otra vez a Estados Unidos como la primera nación con mayor cantidad de contagios y muertes a nivel global, una situación que el exvicepresidente de Obama atribuye en gran parte a lo que considera desaciertos del actual jefe de Estado, que ha negado la gravedad del virus que él mismo padeció y se ha empeñado en priorizar la apertura económica sin atender antes la emergencia sanitaria.
Y es que Klain también trae experiencia en el manejo de este tipo de crisis. En 2014 ganó elogios de los expertos en salud pública como coordinador de respuesta del Gobierno frente al ébola.
“Ron ha sido invaluable para mí durante los muchos años que hemos trabajado juntos, incluso cuando rescatamos a la economía estadounidense de una de las peores recesiones de nuestra historia en 2009 y luego superamos una abrumadora emergencia de salud pública en 2014”, aseguró Biden.
“Esta noche he visto tantos buenos deseos. Gracias, y lamento no poder responder a cada uno de ustedes. Me siento honrado por la confianza del presidente electo y lo daré todo para liderar un equipo talentoso y diverso en una Casa Blanca de Biden-Harris”, replicó Klain en su cuenta de Twitter.
Con estas decisiones, Biden desestima las afirmaciones que considera infundadas, por parte de Trump, sobre un supuesto fraude electoral. En cambio, ha optado por centrarse en cuestiones de transición de Gobierno y se prepara para su juramentación, prevista para el próximo 20 de enero.
La campaña de Trump presentó una demanda federal en Michigan mientras continúa su estrategia legal para tratar de anular los resultados electorales en estados clave. Sin embargo, según los expertos en derecho constitucional, es poco probable que la nueva demanda de Trump allí altere el resultado en un estado que ganó en 2016, pero que según los últimos datos pierde este año por aproximadamente 148.000 votos, o 2,6 puntos porcentuales, según el Instituto Edison Research.
Biden logró la victoria el sábado pasado cuando conquistó una serie de estados en el campo de batalla y superó los 270 votos electorales necesarios del Colegio Electoral para reclamar la presidencia. Biden también obtiene mayoría en el voto popular a nivel nacional por más de 5 millones de boletas, de acuerdo con las proyecciones, aunque algunos estados aún no han terminado de contar los sufragios.
Aún así, Trump, el primer presidente que no logra la reelección desde 1992, se aferra al poder y a su estrategia legal para tratar de empañar los resultados, un camino que dificulta el traspaso de poder tranquilo al que los estadounidenses están acostumbrados.
France 24