El cofundador de Microsoft, Bill Gates, y la que durante 27 años ha sido su esposa, Melinda, ya están oficialmente divorciados, según muestra el acuerdo aprobado por la Corte Superior del condado de King en Seattle (EE UU) al que han tenido acceso los medios locales.
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Los Gates anunciaron a principios de mayo que se divorciaban, tras casi tres décadas de relación en las que fundaron una de las organizaciones benéficas más importantes del mundo, cuya actividad han garantizado que se mantendrá pese a la ruptura. “Creemos que no podemos crecer más como pareja en esta nueva fase de nuestras vidas”, dijeron hace justo ahora tres meses. Bill y Melinda tienen tres hijos, todos ellos ya mayores de edad, Jennifer, de 25 años (de la que más se sabe, amazona y estudiante de Medicina); Rory, de 22; y Phoebe, de 19.
Al día siguiente del anuncio de la separación, los medios estadounidenses revelaron el contenido de los documentos de la petición de divorcio, presentada por Melinda, en la que esta aseguraba que el matrimonio estaba “irremediablemente roto”, que no era necesaria la manutención conyugal y que el pacto de separación determinaría la división de sus propiedades. Según ha informado la revista People, efectivamente no habrá manutención conyugal por parte de Bill hacia Melinda.
Por ahora se desconocen los términos del divorcio, que tendrán que decidir cómo se reparte un patrimonio estimado en unos 110.000 millones de euros. Gates es considerado todavía como el cuarto hombre más rico del mundo, aunque habrá que esperar a que se sepan los datos de la separación (si es que llegan a saberse) para ver si algún pedazo de su fortuna ha pasado a manos de su ya exesposa.
Además, Melinda ha decidido mantener su apellido de casada, aunque en segundo lugar tras el de soltera, por lo que a partir de ahora será conocida como Melinda French Gates.
Según el diario The Wall Street Journal, una de las cuestiones que provocaron la ruptura habría sido la relación que mantenían Bill y el difunto magnate caído en desgracia Jeffrey Epstein, quien se suicidó en la cárcel en 2019. El diario afirmó hace unos meses que Gates y Epstein se vieron en varias ocasiones y que incluso el empresario tecnológico se quedó en alguna ocasión hasta entrada la noche en la mansión neoyorquina de Epstein, que fue detenido tras ser acusador de abusar sexualmente de decenas de adolescentes en sus diversas mansiones de Manhattan y de Palm Beach (Florida) como en su isla de las Islas Vírgenes.
Por su parte, portavoces del multimillonario siempre ha sostenido que en esos encuentros los dos hombres hablaban de cuestiones filantrópicas y que Gates “lamenta todos y cada uno de sus encuentros [con Epstein] y reconoce que llevarlos a cabo fue un error de juicio”. Además, el Journal señaló que, ya en 2013, Melinda llegó a avisar a su marido de que esos encuentros con Epstein la hacían sentir incómoda, pero que pese a ello tanto Gates como algunos empleados de su fundación siguieron en contacto con Epstein, que también tuvo relaciones más o menos cercanas con Donald Trump, Woody Allen, Naomi Campbell e incluso el científico Stephen Hawking.
Además, según reveló el mismo medio, la empresa llegó a investigar una supuesta relación amorosa de Gates con una empleada de Microsoft, que habría tenido lugar en el año 2000. “Contó con la ayuda de un bufete de abogados para realizar una investigación exhaustiva. A lo largo de la investigación, Microsoft brindó un amplio apoyo a la empleada que dio el aviso”, explicaba el diario el pasado mes de mayo.
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