La Unión Europea ha alertado este miércoles de un dramático incremento en el número de hospitalizaciones y muertes por covid-19 durante los próximos dos meses si no se adoptan drásticas medidas para contener la pandemia. Bruselas reclama, en concreto, la aceleración de las campañas de vacunación, la imposición de restricciones sociales en los países con menos del 80% de la población vacunada y la administración de una dosis más a todos los mayores de 40 años que ya habían recibido la pauta completa.
“Las dosis de recuerdo deben estar disponibles para toda la población adulta, con prioridad a las personas mayores de 40 años”, ha urgido la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. La petición de la dirigente comunitaria llega tras la publicación este miércoles del nuevo análisis de riesgo de la covid-19 elaborado por el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, según sus siglas en inglés).
El ECDC anticipa que “la carga de la enfermedad (hospitalizaciones y muertes) será muy elevada en diciembre [de 2021] y enero [de 2022] a menos que se apliquen medidas de salud pública en combinación con un esfuerzo continuo para aumentar la vacunación de toda la población”. El incremento de los contactos sociales, sobre todo con vistas a las fiestas de fin de año, podría colocar a todos los países en una situación de alto riesgo, según el nuevo análisis del organismo.
La directora del ECDC, Andrea Ammon, recomienda una dosis de refuerzo para todos los adultos, con prioridad para los mayores de 40 años. Las recomendaciones del ECDC no son obligatorias para los Gobiernos de la UE, pero se utilizan para tomar decisiones en materia de salud. En septiembre, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), avaló una tercera dosis para la población inmunodeprimida.
New @ECDC_EU risk assessment is clear: we must step up vaccination to control the pandemic.⁰
We want to convince people to get vaccinated.⁰
Boosters should be available for adults, with priority for people over 40 and vulnerable people.⁰
And let’s keep distance and masks!
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) November 24, 2021
El análisis del ECDC concluye que “la situación epidemiológica se ha deteriorado durante las últimas semanas en la mayoría de los países de la UE”. Y apunta que el deterioro es mayor en los países con bajas tasas de vacunación o donde los pinchazos avanzan despacio. Pero avisa de que el ritmo de vacunación parece haber tocado techo en la mayoría de los países “y se observa un empeoramiento epidemiológico incluso en los países con ratios de vacunación más altas”.
La agencia europea atribuye el agravamiento de la situación a la propagación de la variante delta del virus, que es ahora la dominante en Europa y cuya capacidad de contagio es hasta un 60% mayor que la de variantes anteriores. A ello se añade que el virus de la gripe ha recuperado este invierno su ritmo de contagio habitual, tras el descenso que registró durante las primeras etapas de la pandemia en 2020 y 2021.
En la coyuntura actual, las tasas de vacunación logradas no parecen suficientes, según Bruselas, para contener un nuevo repunte de la covid-19. Solo el 65% de la población total ha recibido las dosis de la primera ronda de vacunación y en varios países de la UE no se ha llegado al 50%.
El informe del ECDC insiste en que las vacunas administradas están logrando los efectos buscados: evitar que el contagio provoque una enfermedad grave o la muerte. Los estudios citados por el organismo llevan a la conclusión de que sin vacunas el número de muertes y hospitalizaciones hubiera sido el triple. Pero la agencia reconoce que la efectividad del pinchazo, cercana al 80%, puede decaer ligeramente con el tiempo, sobre todo, en las personas más vulnerables.
La agencia europea recomienda que se refuerce la inmunidad administrando una tercera dosis seis meses después de haber completado la pauta inicial. Y avisa de que la mayoría de las hospitalizaciones en las próximas semanas serán, de hecho, personas que no hayan sido vacunadas.
Por otro lado, Suecia ha anunciado este miércoles que comenzará a inyectar una dosis de refuerzo de la vacuna contra el coronavirus para evitar su avance. El país, que no ha experimentado una nueva ola de contagios, al contrario que sus vecinos, está sin embargo preocupado por que esto le pueda suceder. Hasta ahora, Suecia ha ofrecido una dosis de refuerzo con vacunas de ARNm a las personas mayores de 65 años. “Nos enfrentamos a un invierno incierto”, ha asegurado la ministra de Sanidad, Lena Hallengren. La agencia de salud sueca ha asegurado que estas dosis de refuerzo se podrán inyectar seis meses después de la segunda dosis, comenzando por los mayores de 50 años.
En España, tercera dosis para mayores de 60
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció la semana pasada la inclusión del personal sanitario y de las personas de 60 a 69 años en los colectivos que pueden recibir la dosis de refuerzo. La Comisión de Salud Pública ya había acordado el 5 de octubre administrar la dosis de refuerzo a los mayores de 70 años y a las personas que viven en residencias (cerca de siete millones de ciudadanos). Tres semanas más tarde, adoptó la misma decisión para los dos millones de personas inmunizadas con la vacuna monodosis de Janssen. Ahora mismo, la dosis extra (segunda para Janssen, tercera para el resto) se recomienda para unos 16 millones de personas, algo más de un tercio de la población total de España. Si la indicación se ampliase a los mayores de 40, se ampliaría a otros 15 millones de personas.