A más de 10 años del asesinato del pequeño Bernardino, Cecilia “N” fue capturada en Estados Unidos por personal de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol).
La mujer es acusada por su presunta participación en el secuestro y homicidio del menor en marzo de 2012. Aquella vez, tanto Cecilia “N” como su ayudante, identificada como Delfina, fueron detenidas; sin embargo quedaron en libertad en 2013, por decisión de la jueza Ernestina Pimental, a quien se le investigó por presunta corrupción.
Cecilia “N” se hacía llamar la “bruja de Angahuan”, una comunidad localizada en Uruapan, Michoacán.
La desaparición del pequeño Zury, como lo conocían en el pueblo, ocurrió el 21 de marzo, cuando el menor se encontraba jugando afuera de su casa. Utilizando un juguete de control remoto, la mujer captó su atención y lo sustrajo del lugar, de acuerdo con el diario Reforma.
Luego de privarlo de la libertad, “La bruja” ofreció su ayuda a los padres de Zury y les aseguró que daría con el paradero del menor a través de “su bola de cristal”. En aquel entonces, la familia del niño había recibido llamadas en las que les solicitaban 600 mil pesos por el rescate.
Los padres entregaron una parte del monto que pedían por su hijo y presentaron la denuncia ante la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán (PGJE).
Los vecinos del pueblo decidieron emprender una búsqueda en la zona. La búsqueda duró casi un mes y “La Bruja” se mostraba cada vez más nerviosa. Al estar acorralada, Cecilia y Delfina golpearon a Zury, quien murió por asfixia.
El cuerpo del pequeño Bernardino fue encontrado en un paraje de la localidad de Las Cocinas, ubicada sobre la carretera Uruapan-Los Reyes. Además de Cecilia y Delfina, una pareja fue detenida, argumentaron que “La Bruja” les pagó 5 mil pesos por deshacerse del cuerpo del pequeño.
“La Bruja” estuvo prófuga por nueve años, hasta este 2022, que agentes de seguridad dieron con su paradero.
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