El hámster es una especie de roedor miomorfo, muy popular entre aquellos que buscan alguna mascota o animal de compañía. Este género no solo incluye a estos pequeños y peludos seres, sino también a jerbos, topillos, ratones o lemmings. Una criatura desconocida en Europa, pero muy abundante en la tundras y praderas árticas. Dentro de este cuantioso grupo llama la atención una familia en particular, procedente del continente asiático: los cricetidae. O lo que es lo mismo, el hámster Roborowski. Este presenta multitud de similitudes con el resto de miembros de su género. Sin embargo, destaca entre todos ellos por su diminuto tamaño, el menor de toda la especie, con nueve centímetros de longitud máxima.
Orígenes del Hámster Roborowski
El hámster Roborowski proviene de una región recóndita, situada en la frontera de China y Mongolia. Una ubicación que le proporciona su segundo apelativo: hámster ruso, por su cercanía a Siberia. El desierto del Gobi es su hábitat natural y bajo tierra construyen sus propias madrigueras, a dos metros de profundidad.
Apariencia
Como hemos recalcado anteriormente, esta especie de hámster posee un tamaño medio de cuatro centímetros de altura. Los ojos son grandes, en relación a su pequeño cuerpo, mientras que la cola sí que resulta proporcional al resto del tronco. El pelaje es lacio, suave y de color blanco. Aunque dependiendo de la especie, presenta sobre la cabeza alguna tonalidad diferente.
Personalidad
A pesar de su apariencia dulce y adorable, los hámster Roborowski son bastante inquietos y revoltosos. Por ello, los expertos aconsejan la instalación de algún juguete o rueda en su jaula, con el que puedan satisfacer esa incesante actividad. Sin embargo, también se muestran abiertos a convivir con otras criaturas. Por lo que podrás mantener una relación estrecha y amigable con ellos.
Embarazo y cría
El embarazo en este tipo de roedores dura alrededor de tres o cuatro semanas. Un corto periodo de tiempo que tendrá como resultado una camada de entre dos a seis crías. Su tamaño sorprenderá a aquellos que jamás hayan presenciado el parto de un hámster Roborowski, pues este es muy muy pequeño. Además, como el resto de roedores recién nacidos, no poseen nada de pelo.
Alimentación
Para alcanzar una vida larga y plena, que en condiciones normales llega siempre a los tres años, el hámster Roborowski debe alimentarse de pequeñas cantidades de fruta, semillas, avena o guisantes. Es importante recalcar que dichas porciones deben ser ínfimas, incluso cuando nos aventuremos a ofrecerle algo de carne. Además, debe tener siempre agua limpia a su alcance para evitar la deshidratación.
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