Santi Cazorla vistió la camiseta del Villarreal por última vez este domingo. A sus 35 años ha decidido dar un paso al lado y marcharse al Al Saad qatarí de Xavi Hernández, y como no podía ser de otra manera, fue despedido con todos los honores. “Esta es mi casa y he pasado años maravillosos. Es un final perfecto, metiendo al equipo en Europa, pero esto no es un adiós sino un hasta luego”, dijo minutos después de finalizar el 4-0 del Villarreal al Eibar en el que Cazorla cuajó una gran actuación.
El futbolista de la eterna sonrisa que ni siquiera apagó el calvario de lesiones que le tuvo lejos de los terrenos de juego durante dos años se marcha porque considera que ya no está preparado para rendir al máximo nivel. Una apreciación más que discutible, pero respetable. “En el momento que viera que no pudiese dar el 100% iba a dar un paso al lado, y ha llegado el momento. La espinita es no haberme despedido con afición en la grada, pero desde aquí le doy las gracias”, explicó Cazorla.
Como el asturiano aseguró, puso el colofón a su etapa en el Villarreal dejando al equipo en la Europa League. Y sin duda que él ha tenido muchísimo que ver en ese regreso del ‘submarino amarillo’ a las competiciones continentales.