Leyendo el titular, quizá hayas pensado que es una completa locura poner champú en la lavadora para que la ropa quede más limpia y tenga un olor increíble. Pero lo cierto es que es un truco que funciona a las mil maravillas, razón por la cual en las últimas semanas se ha hecho viral en redes sociales. Funciona sobre todo con la ropa delicada, con la que debemos tener especial cuidado para que no se estropee.
Cómo poner el champú en la lavadora
Nunca nos hubiéramos imaginado que podríamos sacarle tanto partido a la lavadora, pero últimamente estamos descubriendo muchos trucos para que la ropa quede impecable. Bien es sabido por todos lo complicado que puede ser eliminar manchas difíciles, de vino o de sangre, por ejemplo.
Con este tipo de manchas, un lavado normal no es ni mucho menos suficiente. Antes de meter la prenda en la lavadora, tenemos que tratar las manchas con un producto específico para que salgan fácilmente. Ahora bien, cuando se trata de prendas delicadas la cosa no es tan sencilla. Y es que, muchos de los productos anti-manchas estropean los tejidos o alteran su color.
Por suerte, existe una alternativa estupenda para eliminar las manchas en las prendas delicadas: utilizar champú. Ahora bien, no podemos usar cualquier tipo de champú, sino que debe ser suave y sin siliconas. Si es de ingredientes naturales, mucho mejor.
Es tan fácil como añadir unas gotas de champú en la lavadora y poner un programa suave. No tiene que ser el equivalente a la cantidad de detergente, sino simplemente unas gotas. El champú es estupendo para eliminar la suciedad y las manchas difíciles de las prendas delicadas.
Truco de limpieza
Solemos creer que la lavadora, como está en contacto con el agua y el jabón, se limpia sola. Pero nada más lejos de la realidad. Es fundamental que cada tres o cuatro semanas la limpiemos para evitar la proliferación de moho y los malos olores.
Para esto también existen trucos muy simples y efectivos. Uno de los mejores es el del limón y la pasta de dientes. Lo que debemos hacer es lo siguiente. En primer lugar, cortamos un limón por la mitad y ponemos un poco de pasta de dientes a cada lado de la fruta.
Introducimos ambas partes en el tambor, ponemos un poco de pasta de dientes en la parte del cristal de la puerta y programamos un lavado corto. ¡La lavadora queda como nueva!
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