En plena emergencia sanitaria, los caminantes desean volver a sus pueblos, pero recorren el territorio sin medidas de seguridad y con el riesgo de contagio.
Cientos de pobladores de Perú que quedaron atrapados en Lima durante la cuarentena buscan llegar a pie a sus pueblos andinos de origen, haciendo paradas en el camino y desafiando las restricciones del Gobierno por el coronavirus.
Imágenes de la televisión local mostraron a familias enteras, la mayoría con mascarillas, llegar el martes a un poblado fuera de Lima rumbo a la región andina Huancavelica, tras haber caminado tres días, según la policía.
“Si nos quedamos aquí todos vamos a morir”, dijo un joven al canal de televisión Frecuencia Latina.
“Nos han abandonado”, gritaban otros durante la caminata.
Al menos 500 personas permanecieron en el estadio de la localidad de Matucana, a 80 kilómetros al este de Lima, luego de que la policía y el Ejército convencieron a los caminantes de someterse a un test de coronavirus antes de seguir su ruta.
Las autoridades sanitarias han prendido las alarmas porque los pobladores buscan caminar otros 360 kilómetros que hay entre Matucana y Huancavelica, sin las medidas de seguridad y con el riesgo de contagios en plena cuarentena.
El Gobierno del presidente Martín Vizcarra decretó desde mediados de marzo el estado de emergencia nacional con el cierre de sus fronteras y la inmovilización ciudadana, impidiendo con ello los viajes locales interprovinciales.
Durante la emergencia, el Gobierno ha repatriado a peruanos desde el exterior, a quienes aloja en hoteles para cumplir una cuarentena antes de regresar a sus casas. También ha entregado dinero y víveres a familias urbanas pobres ante la emergencia.
Pero estas medidas no han alcanzado a pobladores que estaban de paso por Lima y que habían sobrevivido un mes en hospedajes.
La caravana avanzó a pie con niños y ancianos, con la expectativa de continuar hasta Huancavelica y otras ciudades del centro del país. Durante su paso, muchos eventuales residentes salían para regalarles agua y alimentos.
Pero algunas autoridades del centro del país se han mostrado en contra de que los caminantes regresen a sus lugares de origen por temores a que lleven el coronavirus a regiones andinas donde el brote ha sido menos intenso que en la capital.
“Si permitimos que regresen a Huancavelica podría ser catastrófico”, dijo el gobernador de Huancavelica, Maciste Díaz. “Es necesario poner mano dura, drástica”.
El viceministro de Gobernanza Territorial, Raúl Molina, señaló que en la caravana no solo se encontraban pobladores que quedaron varados en Lima, sino también aquellos que han perdido sus empleos en la cuarentena y desean regresar a sus pueblos.
“Una vez que les hagan despistaje vamos a organizar grupos para que puedan ir a Huancavelica en ómnibus. No pueden ir caminando”, invocó Molina a los pobladores.
(Rts)