Seguro que cuando has leído el titular la primera pregunta que se te ha venido a la mente es la de si necesitas saber bucear para visitar algunas de las ciudades bajo el mar que hay alrededor del mundo. Pues bien, lo cierto es que no. La mayoría de las ciudades de las que vamos a hablar a continuación se inundaron por la construcción de vías acuáticas o embalses.
Kalyazin, Rusia
El origen de Kalyazin se remonta al siglo XII. Vivió una gran época de esplendor durante el siglo XV, y recibió el estatus de ciudad en 1775 por decreto de Catalina la Grande.
La construcción del embalse de Úglich en el año 1940 provocó que el monasterio y gran parte de la ciudad vieja se inundaran.
El invierno es la mejor época para visitar esta ciudad ya que se puede caminar sobre las aguas congeladas del embalse y acercarse hasta la torre del campanario.
San Román de Sau, España
En la provincia de Barcelona se encuentra San Román de Sau, cuyos orígenes datan del siglo X. La construcción del embalse en el año 1963 provocó que la localidad se inundara.
A día de hoy el campanario de la Iglesia de San Román de Sau aparece sobre las aguas cuando el nivel del agua está bajo. La iglesia, de estilo románico lombardo, se levantó en el siglo XI.
Port Royal, Jamaica
Durante el siglo XVII Port Royal fue la sede del gobierno británico en Jamaica. En su época dorada acogió a muchos piratas que atacaban las naves francesas y españolas.
Un gran terremoto y posterior tsunami destruyeron la ciudad el 7 de junio de 1692. El 66% de Port Royal se hundió bajo las aguas del mar Caribe, y la actividad comercial de la isla se trasladó a la actual capital de Jamaica, Kingston.
Krishna, la India
Para visitar Krishna sí que necesitas saber navegar porque la ciudad se encuentra completamente sumergida.
Las ruinas están en muy buen estado de conservación, y lo que más llama la atención es que son geométricamente perfectas. Investigadores de todo el mundo llevan varias décadas explorando esta ciudad.
Estas son algunas de las ciudades bajo el mar alrededor del mundo que se pueden visitar. Todas ellas son objetos de curiosidad y de investigación.
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