CM Punk explica por qué eligió firmar con AEW

CM Punk y Tony Khan participaron en una conferencia de prensa después de la AEW Rampage. Después de hacer su llegada a All Elite Wrestling más temprano en la noche con una atronadora ovación de los fanáticos de Chicago en el United Center, Punk arrojó algo de luz sobre lo que lo convenció de finalmente dar el salto a la lucha libre profesional luego de su salida de la WWE en 2014.

“Seguiré adelante y estropearé eso, he estado hablando con Tony durante probablemente un año y medio. Algunas chicas son más fáciles de meterse en la cama, yo no. ‘Oh, necesito más dinero y menos citas’. Literalmente era solo hablar con Tony, conocerlo. Cuanta más gente que él empleaba que yo conociera, haría preguntas, me dirían cosas. He estado en el juego durante unos minutos, así que he (promotores antes). Lo he visto, creo que lo he rastreado desde la caída de ECW, cada seis meses o un año aparece alguien (diciendo): ‘Tengo dinero, vamos a tener TV , vamos a utilizar a todos los chicos de ECW ‘. Esto no es un desaire a Tony en absoluto, es más un desaire a mí por ser una persona paranoica, neurótica, angustiada y muy cuidadosa.

“Y no tenía prisa. La pandemia me ayudó un poco. Sabía que no podría debutar si no había gente en el edificio. Siempre digo que el tiempo lo es todo, y hubo muchos accidentes felices a lo largo la forma que lo hizo posible “, agregó.

Luego se le preguntó qué hizo que ahora sea el momento adecuado para regresar: “El tiempo lo es todo, se sintió bien. Cuando dejé Ring of Honor, no quería ir, pero sentí que no podía quedarme. No puedes realmente explicarle eso a la gente, es solo algo por lo que vives. Cuando estaba enfermo, cansado y herido y me di cuenta de que a esta gente (WWE) no le importaría si yo moría hoy, habría otro programa mañana. Y supe que Tuve que alejarme de la situación. No sabía cuánto tiempo me iba a tomar sanar, y luego vino esto. Gracias a todos los involucrados en AEW, me recordó los lugares donde solía trabajar que amor, donde se trataba más del espíritu de la cosa. En lugar de sentirse como una casa, se sentía como un hogar “.

Más tarde se le pidió que explicara los “accidentes felices” antes mencionados: “Cuando digo accidentes felices, me refiero a que nada fue forzado. Fue muy relajado, ni siquiera quiero llamarlo una negociación”.