Pfizer solicitó el martes a la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por su siglas en inglés) que autorice una tercera dosis de su vacuna contra el COVID-19 para niños de entre 5 a 11 años.
La solicitud se produce después de que Pfizer publicara datos de ensayos clínicos a principios de este mes que muestran que las muestras de sangre de 30 niños en el grupo de edad tenían un aumento de 36 veces en los niveles de anticuerpos contra la variante Ómicron en comparación con dos dosis de la vacuna.
La vacuna de refuerzo es una dosis de 10 microgramos, el mismo nivel que la serie de vacunación primaria. La tercera dosis no demostró ningún nuevo problema de seguridad en el ensayo, según Pfizer.
La FDA autorizó las dosis de refuerzo de Pfizer para menores de 12 a 15 años en enero, cuando la variante Ómicron arrasó en todo el país.
La protección que brindan las vacunas contra la infección ha disminuido con el tiempo, particularmente en el contexto de Ómicron, que evade los anticuerpos que impiden que el virus infecte las células humanas. Sin embargo, las vacunas aún brindan una fuerte protección contra enfermedades graves.
No está claro si el comité asesor de la FDA se reunirá para discutir los datos y hacer una recomendación.
La FDA no convocó reuniones del panel de expertos externos antes de autorizar la tercera inyección para menores de 12 a 15 años en enero y la cuarta inyección para personas de 50 años o más el mes pasado.
Varios miembros del panel de la FDA, así como el comité asesor de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), han criticado a las agencias del gobierno por ampliar repetidamente las dosis de refuerzo sin consultarlos.
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