Todas nos hemos lavado el pelo cientos de veces a lo largo de nuestra vida. Se trata de un hábito que tenemos muy interiorizado, hasta el punto de que ni siquiera nos planteamos si lo hacemos bien o mal. Pues bien, hay una serie de errores que seguro que tú también cometes al lavarte el pelo, y que deberías evitar desde ya si quieres lucir una melena con brillo llena de vida.
Utilizar agua muy caliente
Pocas sensaciones hay mejores que la de llegar a casa en invierno y darse una ducha de agua caliente. Sin embargo, si quieres cuidar la salud de tu melena, mejor no lo hagas. El problema es que el agua caliente parte la fibra y abre la cutícula, lo que debilita el cabello y favorece su caída. Lo ideal es utilizar agua templada, y el último aclarado hacerlo con agua fría para sellar la cutícula. Quizá al principio te resulte complicado, pero todo es cuestión de acostumbrarse.
Usar el mismo champú para la raíz y las puntas
Seguro que este es uno de los errores que cometes al lavarte el pelo porque es algo muy común: utilizar el mismo champú para toda la melena. Las necesidades del cuero cabelludo y de las puntas pueden ser distintas.
Si por ejemplo el cuero cabelludo está irritado y descamado necesitas un champú con propiedades antiinflamatorias y astringentes para esta zona. Y, si las puntas están secas, tienes que usar un producto con un gran poder nutritivo e hidratante.
Olvidar la exfolicación
La exfoliación es uno de los tratamientos de belleza más importantes para la piel y el cabello. En el cuero cabelludo también se acumulan células muertas y residuos de los diferentes productos, y tienes que retirarlos semanalmente para que el folículo piloso pueda respirar. Debes utilizar un exfoliante capilar una vez por semana.
Enrollar la toalla
Y, por último, ¿qué es lo que haces al salir de la ducha? Si te enrollas la toalla alrededor del pelo estás cometiendo un gran error. Así sólo consigues que se parta el pelo y su salud se vea perjudicada. Lo aconsejable es que simplemente te coloques una toalla de algodón sobre la melena para que absorba el exceso de humedad. Si quieres acelerar el proceso, puedes dar algunos toquecitos, pero sin frotar.
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