Ícono del sitio La Neta Neta

Cómo afectará el cambio de hora a nuestro sueño

Llega el momento de hacer el cambio de hora al horario de invierno. Cuando esta noche sean las 3 de la madrugada tendremos que cambiar los relojes a las 2, y aunque con ello vamos a ganar una hora de sueño, lo cierto es que entrar en este cambio de horario puede afectarnos en mayor o menor medida. Descubramos a continuación, cómo afectará el cambio de hora a nuestro sueño.

Cómo afectará el cambio de hora a nuestro sueño

La madrugada de hoy nos va a «regalar» una hora más de sueño gracias a que cambiamos al horario de invierno. La mayoría no lo notará hasta que se despierte ya que móviles, tablets y ordenadores cambian de manera automática cada vez que pasamos del horario de verano o al de invierno y quien tenga relojes de cuerda o el reloj de la cocina procurarán cambiar la hora antes de acostarse para que mañana domingo puedan leer la hora correctamente.

Posiblemente entonces ni pienses en esa hora en la que retrasamos los relojes pero lo cierto es que entrar en un cambio de horario como el de invierno puede afectarnos al sueño y en los primeros días hacernos sentir como un pequeño jet lag. Es posible entonces que esta próxima semana te sientas algo más cansado, más desconcentrado y que te cuesta conciliar más el sueño. Síntomas todos ellos que son más o menos soportables y además pasajeros, pero también hay personas que lo sienten más intensamente.

Cómo evitar que nos afecte el cambio de horario

El método para que el cambio de hora no nos afecte tanto es prepararnos varios días antes. Logan Schneider, doctor experto en sueño de Google Health explica que basta con acostarse un poco antes los días previos al cambio de hora y también despertarse unos 15 minutos antes.

Con sólo hacer eso nuestro cuerpo se adaptará mejor y no notaremos tanto que hemos retrasado una hora el reloj, pero además Schneider asegura que mantener una buena temperatura en el dormitorio es otra de las claves. Evitemos entonces un gran contraste entre la temperatura ambiente y la temperatura de tu cuerpo. Solo una temperatura media garantizará una buena calidad del sueño REM que en definitiva, es la más importante para el descanso nocturno.

Procuremos además tener algo de luz natural al despertar dado que resulta clave para el ritmo de sueño del ser humano. Sin embargo para muchas personas hacer esto resultará prácticamente imposible teniendo en cuenta que con el horario de invierno al despertar, será todavía de noche.

Los niños, más afectados

Por otro lado, son los niños quienes más notan el cambio y a quienes más les afecta debido a su sistema nervioso central (donde se regula todo el mecanismo del sueño y de la vigilia) que es más inmaduro que el de un adulto. Por este motivo es normal que estos días se muestren más cansados pero también más irritados.

Una buena alimentación, cenar ligero y dejar pasar al menos dos horas antes de irse a la cama e incluso hacer algo de ejercicio para cansarse puede ser también bueno para que al irnos a dormir no nos cueste conciliar el sueño.


Source link
Salir de la versión móvil