Las de pelo rizado lo tienen más fácil para dar volumen a su cabello, pero si la naturaleza te ha dado un cabello más bien liso, sin volumen y fino, entonces las técnicas de peluquería son casi milagrosas, anota los consejos sobre cómo cuidar el cabello con permanente. Lo mejor es que no requiere de tantos cuidados pero puede resecarse mucho antes, así que las ondas se marchitarán antes.
Este moldeado puede ser de ondas o de rizos algo más pequeños y no sale igual para cada tipo de cabello porque cada uno es distinto.
Acondicionador sí o sí
También puedes aplicar mascarilla. Pero el acondicionar será tu perfecto aliado porque este tipo de permanentes suele resecar muchos el cabello y el rizo se acaba chafando. El resultado entonces es una mezcla de rizado y liso algo complicada de definir que nos deja un look poco armonioso.
Con el acondicionador conseguir humedecer el cabello para que esté mucho mejor ya que necesitaremos más hidratación que antes.
Champú especializado
Si hasta el momento usabas un champú neutro o bien para cabellos lisos ahora debes pasarte a un champú indicado a uno para cuidar el cabello con permanente. Porque se adaptarán mejor a él y están elaborados para estos cabellos en especial.
Fuera peine
Es evidente que vamos a necesitar desenredar el cabello porque los rizos se enredan más, pero para peinarlo, deja de lado el peine tradicional. Lo que vas a conseguir es deshacer el rizo y dejar una masa algo elevada y poca cosa más. Es mejor optar por un cepillo de púas muy anchas y hasta de madera para que puedas lucir igualmente la permanente.
Espumas pero sin pasarse
Un secreto para que el rizo se quede ahí a la vista de todos es la espuma, geles o serum. Pero no te pases en su aplicación porque 1. el cabello acaba más graso y 2. dañamos el medio ambiente con tanto químico. Lo ideal es aplicar esta espuma cuando el pelo está mojado porque así avivamos el rizo con el difusor del secador, aunque tampoco hay que abusar de él.