La Antigua Grecia es el periodo de la historia griega que abarca desde el año 1200 a.C hasta el año 146 a.C. La cultura griega tuvo una gran influencia en el Imperio Romano, que la difundió por Oriente Próximo, Europa y el norte de África. La civilización de la Antigua Grecia ha sido muy importante en la filosofía, la política, la lengua, las artes y la ciencia. A continuación hemos recogido los datos más interesantes.
Juegos Olímpicos
Las primeras olimpiadas de la historia se celebraron en el año 776 a.C. Tenían lugar en la ciudad de Olimpia, y competían los mejores atletas de cada ciudad-estado y reino de la Antigua Grecia. Todos competían en honor a Zeus, y los juegos olímpicos eran un acontecimiento tan importante que todas las guerras y conflictos se paraban durante unos días.
Esperanza de vida
En la Antigua Grecia la esperanza de vida era muy alta, hasta el punto de que muchas personas vivían hasta los 100 años o más, todo un hito para la época. Los griegos disfrutaban de una gran calidad de vida, combinando la dieta mediterránea y la actividad física. Además, tenían un buen sistema sanitario.
Prostitución
Si hay algo que llama mucho la atención de los griegos hace varios miles de años es que la prostitución estaba completamente aceptada en la sociedad, tanto por hombres como mujeres. Ellas anunciaban sus servicios de una manera muy discreta. Llevaban sandalias y, cuando querían atraer la atención de un hombre, escribían la palabra «Sígueme» en el suelo con su pie. Además, sólo las prostitutas llevaban los labios pintados de rojo.
Hígado
Aunque a día de hoy se considera que el órgano responsable de las emociones que sentimos es el corazón, en la Antigua Grecia era el corazón. Esto explica el conocido mito de Prometeo. Los dioses le castigaron a que las águilas le devoraran el hígado, pero este órgano se regeneraba una y otra vez.
Cejas
Una de las grandes curiosidades de la Antigua Grecia que muy pocas personas conocen es que las cejas unidas simbolizaban la inteligencia. Aunque actualmente se considere algo muy poco atractivo, para los griegos era más bien todo lo contrario. Quienes llevaban las cejas juntas daban a entender que eran muy inteligentes, y, en el caso de las mujeres, se consideraba un signo de belleza. Incluso tenían por costumbre pintárselas.
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