Jugo de granada es conocido por estar lleno de vitamina C y antioxidantes. Hacer tu propio jugo es una forma fácil y divertida de proporcionarte estos nutrientes. Las granadas están disponibles en los EE. UU. Durante los meses de invierno, lo que las convierte en un impulso nutricional ideal para su dieta de invierno. Una granada de tamaño mediano producirá aproximadamente 1/2 taza de jugo. Si está preparando jugo para una multitud, deberá planificar en consecuencia. El jugo de granada no tiene una larga vida. Dura hasta 3 días en nevera. Copiado encima.
Paso 1: cortar la granada
La fruta de la granada tiene una piel dura. Si no tiene cuidado y aplica demasiada fuerza, se encontrará salpicado de jugo de granada justo al comenzar. Una forma fácil de cortar la granada es cortar la parte superior de la fruta. Marque la granada en cuatro secciones. Ahora sostenga la granada marcada sobre un tazón para recoger el jugo que se desprenda y use los dedos para separar las cuatro secciones.
Paso 2: quitar la membrana
Las semillas de granada están protegidas por una membrana amarga, que debe quitarse antes de comenzar a hacer jugo. Coloque las secciones de granada en un recipiente con agua fría. Extiende suavemente las semillas de la membrana. Una vez que se hayan liberado todas las semillas, reúna toda la membrana y deséchela.
Paso 3: jugo
Coloque todas las semillas en una licuadora y presione las semillas lentamente hasta que estén licuadas. Coloque una gasa o una bolsa de colador en una jarra o taza (lo que vaya a utilizar para almacenar el jugo). Si es necesario, puede usar un balde y luego transferir el jugo más tarde. Si está usando una gasa, fíjela al recipiente con la goma elástica o una cuerda para que tome la forma de una bolsa para atrapar el jugo y la pulpa. Vierta lentamente las semillas de granada licuadas en la gasa o en la bolsa coladora. El jugo se filtrará, pero las semillas no. Si tiene suficientes semillas, el jugo continuará filtrándose durante bastante tiempo, así que tenga paciencia. Puede apretar suavemente su bolso con las manos limpias para ayudar a que el proceso avance.
Paso 4: Exprimir a mano
Si no tiene una licuadora, puede colocar las semillas en una bolsa de plástico y presionar suavemente las semillas para liberar el jugo. Una vez que haya exprimido completamente las semillas, pase el jugo por la estopilla o el colador como lo hizo en el paso 3. Este método puede ser el preferido incluso si tiene una licuadora porque puede evitar que parte del sabor amargo de las semillas pulverizadas ingresen al jugo.
Paso 5: Toques finales
Una vez que haya colado tanto jugo como pueda, pruébelo. Si encuentra que el jugo es demasiado ácido, puede agregar un edulcorante. También puede agregar un poco de agua para disminuir la concentración de jugo. Enfríe su jugo y sirva. A medida que tenga más confianza en sus habilidades para hacer jugos, podrá agregar otros sabores de frutas que complementen el jugo de granada. Una vez que tengas el jugo listo, puedes usarlo de varias formas. El jugo de granada es ideal para fiestas y también hace excelentes batidos y sorbetes.