Si tienes un hámster como mascota, es muy probable que tu mascota haya hecho al menos uno o dos intentos de escapar de los confines de la jaula del hámster. Los hámsteres son famosos artistas del escape y, a veces, mantener uno dentro de su jaula puede ser un desafío. Sin embargo, hay muchos trucos y técnicas que puedes usar para hacer que una jaula de hámster sea más segura. Variarán según su jaula individual y su hámster, pero con la ayuda de una buena planificación, debería poder evitar que su hámster se escape o asegurar una jaula de la que su hámster ha descubierto cómo escapar. Aquí hay algunas estrategias que puede usar cuando se proponga hacer que su jaula de hámster sea a prueba de escape.
1. Elegir una jaula
A veces, una jaula simplemente no puede contener un hámster en particular debido a cómo está diseñada. Por ejemplo, la mayoría de las jaulas de malla de alambre son inútiles para contener hámsteres enanos. Los hámsteres enanos son lo suficientemente pequeños como para meter la cabeza entre los barrotes de una jaula de alambre. Cualquier abertura por la que un hámster pueda pasar sus cabezas, también pueden pasar sus cuerpos, o peor aún, pueden atascarse y terminar asfixiándose.
Por esta razón, debes usar un acuario (debidamente ventilado) o una jaula de plástico improvisada para hámsteres enanos. Sin embargo, ambos vienen con sus propios problemas. Los acuarios pueden ser difíciles de mantener adecuadamente ventilados, ya que están diseñados para estar completamente sellados y pueden atrapar malos olores y gases dañinos en el interior con su hámster. Los contenedores de plástico son excelentes, a menos que su hámster decida masticarlos, en cuyo caso es solo cuestión de tiempo antes de que haya un agujero en forma de hámster en el contenedor.
Los hámsters osos de peluche más grandes aún pueden pasar a través de las barras en determinadas circunstancias. Si las barras de la jaula se pueden doblar, un hámster persistente eventualmente las doblará. Las jaulas con esquinas no reforzadas pueden ser vulnerables a esto, así que asegúrese de probar todas las barras antes de comprar una jaula.
2. Prevención de fugas
Pruebe todas las entradas y salidas de la jaula. Si alguno de ellos se siente flojo, considere comprarle un candado de combinación simple. Cuanto más simple, mejor: un hámster no muerde el metal ni abre un candado, pero un candado que sea fácil de abrir es lo mejor para su conveniencia.
3. Arreglar una jaula
Incluso si asegura una jaula de hámster lo mejor que pueda, su hámster aún puede escapar. ¿Cómo evitar que esto vuelva a suceder? Primero, debes averiguar cómo escapó tu hámster.
Si se trataba de un problema, como una puerta suelta o una apertura, considere agregar una cerradura o bloquear esa salida de forma permanente. Recuerde, a los hámsteres les encanta masticar y pueden ser muy persistentes, así que no use nada que puedan masticar para mantener cerrada la salida. Lo mejor es un candado o algo pesado.
Si se trataba de un problema más grande y permanente, como barras dobladas o un agujero, es posible que deba comprar una jaula nueva y mejor. Puede usar un recipiente de plástico como solución temporal o mantener la jaula de su hámster dentro del recipiente (sin tapa, por supuesto) como solución permanente, semipermanente o temporal.