Este lunes, funcionarios mexicanos y estadounidenses se reunieron para delinear las acciones binacionales para frenar el flujo ilícito de armas.
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, informó a través de sus redes que concluyó la reunión a la que convocó este lunes el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, en la cual participó el embajador de Estados Unidos, Christopher Landau y su equipo, con el fin de “congelar tráfico ilícito de armas hacia México”.
En la misma participaron el encargado de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio; así como los titulares de Sedena y Marina, Luis Cresencio y Rafael Ojeda.
“Habrá un antes y un después de la llamada del sábado entre los presidentes López Obrador y Trump en esta materia”, aseveró.
La reunión de alto nivel se dio en el marco de las acciones del gobierno mexicano tras el operativo “fallido” en Culiacán, Sinaloa, que resultó en la detención y posterior liberación de Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín, el Chapo, Guzmán. No obstante, no existe una comunicación del gobierno que precise si se abordó o no este asunto.
El encuentro fue adelantado por Aristegui Noticias y se apuntó que participarían también funcionarios de la Agencia Antidrogas (DEA), de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), y de la Oficina de Protección Fronteriza y de Aduanas (CBP, por sus siglas en inglés).
El pasado sábado, durante una gira en el estado de Oaxaca, el canciller mexicano refirió que en una llamada telefónica entre el presidente López Obrador y su homólogo estadounidense, Donald Trump, ambos líderes acordaron “congelar” el tráfico de armas, aunque no explicó cómo:
Recibí llamada del presidente Trump expresando su solidaridad por los hechos de Culiacán. Le agradezco el respeto a nuestra soberanía y su voluntad por mantener una política de buena vecindad, sustentada en la cooperación para el desarrollo y el bienestar de nuestros pueblos. pic.twitter.com/XAtMrC4nhF
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 19 de octubre de 2019
Según Expansión, el acuerdo que anunciarán ambos países llevará el nombre de ‘Frozen’, y con este se buscará frenar el tráfico de armas de fuego fabricadas en Estados Unidos y que son ingresadas a territorio nacional de contrabando.
Durante la mañanera del pasado 12 de septiembre, el canciller señaló que 70% de los delitos con armas de fuego en México están relacionados con armas compradas en la Unión Americana, y que por ello plantearon no solo el control, sino el congelamiento del tráfico de armas. Específicamente, estas acciones se llevarán a cabo en cinco puntos: San Diego – Tijuana, El Paso – Ciudad Juárez, Laredo – Nuevo Laredo, McAllen – Reynosa y Brownsville – Matamoros.
Los videos e imágenes que circularon en redes sociales el pasado 17 de octubre dieron muestra del armamento con el que cuenta el Cártel de Sinaloa, entre ellas, una ametralladora Browning M2, así como rifles tipo Barrett M82A1 calibre .50 y fusiles de asalto tipo AK-47 y AR-15.
Dos días después de los enfrentamientos en Culiacán, Ebrard afirmó que las armas de alto calibre utilizadas por grupos criminales eran “propias de una guerra” y que, de haber continuado con el operativo de captura de Ovidio Guzmán, la cifra de muertos podría haber llegado a 200.