Los primeros días de septiembre son el momento de retomar la normalidad interrumpida por el verano y, este año, por el coronavirus, que cortó de golpe cualquier indicio de ella a mediados del mes de marzo. Ahora que el curso escolar y el político tratan de volver a sus cauces, los reyes de España también tratan de demostrar que hacen una cierta vida normal después de una temporada estival cuanto menos agitada.
El martes por la tarde, don Felipe y doña Letizia acudían a un evento junto a la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, para celebrar el Día del Cooperante. Se trata del primer acto en el que se ve junta a la pareja después de sus días de vacaciones y de visitas en las islas Baleares, a mediados de agosto. El lunes ya se vio al rey Felipe en el acto de apertura del año judicial, también en Madrid, un acto de carácter solemne al que acudió sin la compañía de la Reina. Además, se había podido ver a doña Letizia a principios de mes en una reunión de trabajo con la Federación de Enfermedades Raras.
Para celebrar el Día del Cooperante, que se conmemora el 8 de septiembre en todo el mundo, los Reyes presidieron un acto en el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación. El rey acudió con pantalón gris y chaqueta azul, sin corbata, mientras que la reina optó por un vestido de tweed con un punto ya otoñal de Zara. Allí charlaron con cooperantes de Panamá, Filipinas, El Salvador… no sin ciertos problemas técnicos y reconocieron la gran labor que hacen, a menudo con escasos medios. Hay más de 2.600 cooperantes españoles repartidos por 95 países de todo el mundo.
Esa vuelta al trabajo de los Reyes coincide con la vuelta al cole de su hija mayor, Leonor, de 14 años y que cumplirá 15 años en octubre. La princesa de Asturias ha regresado a las aulas del colegio privado Santa María de los Rosales, situado en Aravaca (Madrid). La infanta Sofía, que cumplió 13 años en abril, volverá a clase el viernes, pero ha querido acompañar a su hermana en este primer día de cuarto de Educación Secundaria Obligatoria antes de empezar ella segundo de ESO.
Vestida con uniforme de suéter azul marino y falda gris y peinada con una larga trenza, Leonor ha llegado al colegio en un coche conducido por su padre poco antes de las 8.30 de la mañana. Como todos los niños mayores de seis años en todos los colegios de España, la princesa ha acudido con mascarilla, que no se ha quitado en ningún momento, ni siquiera en el saludo a los fotógrafos que se congregaban a las puertas del centro para retratarla. A la entrada, se le ha tomado la temperatura.
Ni el rey ni la princesa Sofía se han bajado del coche ni han posado con Leonor, puesto que las recomendaciones de la escuela para este atípico arranque de curso es que los alumnos lleguen junto a un solo acompañante. De ahí que la reina Letizia haya decidido no acudir al centro.
En los centros públicos y concertados de la Comunidad de Madrid, la educación en cuarto de la ESO es semipresencial, pero en el Santa María de los Rosales se ha optado por, en principio, tratar de mantener todas las clases de forma presencial. Tras este curso escolar, Leonor tendrá que elegir la rama de Bachillerato (Artes, Humanidades, Ciencias Sociales o Ciencias Naturales) que estudiar y decidir algo más sobre su futuro educativo. Además, en cuarto de la ESO en su colegio, católico, se suele dar la confirmación, pero no se sabe si la princesa la hará, tanto por su condición de heredera como por el coronavirus.
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