“Que se sepa que es inmoral el saltarse o brincarse la fila, es una inmoralidad si no nos corresponde”, expresó el presidente, quien adelantó que ya hay una investigación para castigar el abuso.
El doctor José Rogel Romero, director del Centro Médico “Lic. Adolfo López Mateos” y su familia sí recibieron la aplicación de la vacuna de Pfizer-BioNTech, confirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que en la mañanera del martes se hiciera la denuncia.
En Palacio Nacional, explicó que tras el señalamiento, se hizo la investigación y se comprobó que en efecto, el pasado 24 de diciembre, el médico, su esposa y una de sus hijas fueron vacunados en las instalaciones de la 22 Zona Militar, ubicada en el municipio de Santa María Rayón, Estado de México.
“Llegó y con influyentismo se vacunaron. No voy a hablar de los nombres porque eso va a corresponder a la investigación que ya se inició para castigar esta irregularidad y abuso”, expresó.
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Por lo anterior, volvió a pedir el apoyo de la población para que dé a conocer esta clase de abusos, ya que dijo, no se trata solo de una mujer o un hombre o de los servidores públicos el poder enfrentar, detener y cortar de tajo con el influyentismo que, dijo, es un vicio, un mal hábito que viene de lejos.
“Que se sepa que es inmoral el saltarse o brincarse la fila, es una inmoralidad si no nos corresponde. Si hemos decidido, de acuerdo a las recomendaciones de los expertos, que lo primero es vacunar al personal de salud que está en hospitales Covid para protegerlos porque están salvado vidas y luego adultos mayores porque al vacunarlos estamos evitando el 80% de la mortalidad, por eso se decidió que la población preferente después de salud sean adultos mayores porque son los más vulnerables”, subrayó.
“En tercer lugar a enfermos crónicos que no se haya vacunado en el grupo de adultos mayores y cuarto grupo los maestros en la medida que se vayan incorporando al sistema de educación presencial en estados donde no tengamos mucha incidencia de la pandemia, en estados con semáforo verde”.
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Aunque la Secretaría de Salud mexiquense argumentó que la aplicación al médico se debía a que el hospital donde labora es una de las unidades hospitalarias más activas en la atención a pacientes con Covid-19 y porque en dos ocasiones ha estado infectado, también reconoció que se presentaron errores en la logística.
La dependencia estatal dijo que fue un error por parte de la empresa contratada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para el diseño del sistema de comunicación que permitiría confirmar la asistencia de los beneficiados, “lo que ocasionó descontrol y que el personal de salud no acudiera en su totalidad a la hora asignada”.
Por esta razón, sostuvo, el personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) determinó continuar con la vacunación, debido a que el biológico ya se encontraba preparado y solo cuenta con seis horas para su aplicación.
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Por otro lado, el primer mandatario reiteró que si las empresas quieren comprar la vacuna anti-Covid y distribuirla en México no habrá ningún obstáculo. Adelantó que ya se llegó a un acuerdo para que los interesados presenten su petición por escrito y que anexen el contrato de compra de la dosis.
“Desde luego debe tratarse de una vacuna autorizada por las autoridades médicas sanitarias de los países donde ya se están aplicando vacunas y autorizada en México, pero si ya está autorizada, si es AstraZeneca, Pfizer, CanSino, ya no hay problema, pueden comprarla y distribuirla. Hay libertad para eso porque de todas maneras nosotros ya tenemos prácticamente garantizada la aplicación de la vacuna para todos porque es un derecho”, apuntó.