Blanca Suárez es única y pocas se atreven como ella. Cuando pisa una alfombra roja nunca pasa desapercibida, optando por looks arriesgados que defiende a la perfección con su femenina silueta y si estilo propio. Sin restarle mérito, la gran responsable de este fenómeno es Leticia Riestra, experta en la que confía sus estilismos desde hace años. Ideóloga también de la elección de armario que la actriz madrileña escogía para su última aparición pública. Por fin llega a los cines El verano que vivimos, película que coprotagoniza junto a Javier Rey, quien pese a que ninguno de los dos lo ha confirmado es a todas luces su actual pareja fuera de la ficción. Con motivo del estreno se celebraba estos días una presentación en el Hotel Four Seasons de Madrid y Blanca, de nuevo, nos ha conquistado.
Empecemos por el vestidor. La joven ha lucido un look de corte masculino formado por una camisa de microcuadros, un pantalón de lana gris de para ancha y con pinzas, una corbata de rejilla y zapatos de charol. Un total look firmado por Dior, que pertenece a la colección de invierno 20/21 de Maria Grazia Chiuri. Masculinidad y feminidad en un solo outfit. Los pendientes, de aire retro, también son de la misma firma.
Si bien la moda es terreno de Leticia Riestra, la parte de peluquería y maquillaje tiene otro nombre, Natalia Belda. La expareja de Mario Iglesias confía en sus manos y talento también desde hace tiempo y es la artífice de los acabados beauty que luce en alfombras rojas y compromisos frente a los focos. Todo un acierto la coleta baja y pulida con la que redondeó el look de Dior, a la que añadió unos mechones sueltos que le enmarcaban el rostro. Y no iba a ser menos el maquillaje, esta vez natural, discreto, protagonizado por sus siempre espectaculares pestañas y con unos labios en tonos tierra.
Blanca ha confesado en más de una ocasión que se apunta a las extensiones de pestañas y que sus cejas están perfiladas con la técnica del microblading (pigmentación semipermanente), dos rasgos que cobran mucha personalidad en su rostro, que se presta a la perfección para un make up nude y de tonos naturales como este. ¿Te gusta? Pues te contamos cómo conseguirlo.
Piel pulida
Una de las claves para un maquillaje de este tipo es contar con una base de maquillaje que se ajuste bien a las características de tu rostro. Que se funda bien en la piel y no levante el tono sino que realce la naturalidad. Siempre puedes disimular granitos o rojeces aplicando un corrector y aplicar iluminador en la zona de los pómulos.
Tonos tierra
Tanto las sombras como el colorete y los labios están armonizados en una paleta de color tierra. Elige un tono marrón suave para los ojos, que sea de acabado mate, y extiéndelo en el párpado inferior. Para los pómulos un ligero y discreto toque, nada de marcar la zona. Y para los labios escoge un tierra que te favorezca, suave pero no nude, y un aplicador de acabado glossy no pegajoso para dar volumen y jugosidad.
Enfatiza la mirada
Una máscara de pestañas que cubra bien, aporte densidad, volumen y longitud. Se trata de un maquillaje muy natural pero eso no significa que no pueda ser potente y con carácter. Maquilla también tus cejas pero ojo con el tono, que el resultado siga siendo el perseguido, la naturalidad.
Ahora que tienes el paso a paso solo falta hacerse con los productos. Hemos ido de compras low cost y te dejamos algunas pistas para que consigas el superlook de Blanca Suárez, que además es versátil y te sirve para todo tipo de ocasiones.