Sergio Aguayo criticó la falta de preparación de autoridades de salud y Lorenzo Meyer consideró que la emergencia por el Covid-19 sólo se resolverá con una vacuna.
La politóloga Denise Dresser celebró el acuerdo entre los hospitales privados y el gobierno federal para liberar 3 mil 115 camas del sector público de salud y con ello enfocarse en la atención de personas infectadas por Covid-19.
“Refleja espíritu de colaboración en vez de enfrentamiento entre el gobierno y el sector privado”, expresó durante la Mesa de Análisis de Aristegui en Vivo.
“Solo un gobierno eficaz, capaz de sumar en vez de dividir, proveer información confiable y datos verificables y redireccionar todos los recursos necesarios al sector salud nos ayudará a salir de esta crisis de Covid-19”, abundó.
La también académica sostuvo que las decisiones que tomen las empresas y los gobiernos federal y estatales en las próximas semanas, serán determinantes para salvar vidas
“Qué bueno que el gobierno mexicano lo reconozca. Necesitamos a todas las manos: gobierno, Iniciativa Privada, burocracia, partidos, científicos, técnicos, aliados, adversarios; las mejores mentes de México para lidiar con la crisis que se avecina, llevar a cabo la mitigación y planear la recuperación”, apuntó.
Para Dresser, el convenio “Todos Juntos contra el Covid-19”, el cual tendrá duración de un mes –del 23 de abril al 23 de mayo–, refleja que no es momento de rencillas, desplantes o presidentes inmunes.
“Es muy importante este ejemplo de tregua entre el gobierno y el sector privado en el ámbito de la salud, porque importa más ganar la guerra contra la catástrofe que ganar la guerra política. Ante el Covid-19, se necesitan más acciones como las que se anunciaron esta mañana y ojalá sea el rumbo por seguir en las próximas semanas y meses”, manifestó.
En tanto, el académico Sergio Aguayo enfocó su análisis en señalar que una vez más las autoridades de salud no se prepararon, pese a lo que nos decían.
Expuso las históricas diferencias entre la Secretaría de Salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social con los brotes de infección que han surgido en diversos hospitales porque carecen de lo más básico, y criticó que los vuelos de Aeroméxico México-China-México para traer al país equipo e insumos médicos son el típico “bomberazo”.
“Contrataron con Aeroméxico 20 vuelos a China para traer en los primeros dos vuelos lo más básico, guantes y mascarillas, pero no nos han dicho cuánto costó, supongo que quieren ayudar a Aeroméxico. Me resulta incomprensible que estén usando aviones de pasajeros cuando sería más económico usar aviones de carga, o sería más consecuente con el mito de que estaban preparados, de que los hubieran traído por container en caso de que se importaran de China; lo que estamos viendo es la improvisación, a ver cómo lo resuelven”, manifestó.
Al mismo tiempo, y sin dar muchos detalles, afirmó que el pacto firmado este lunes entre el sector público y el privado tiene otro acuerdo del cual no se ha hablado, y este tiene que ver con el hecho de que ya está decidido a qué pacientes se les darán respiradores en caso de que al estar infectados por coronavirus, su situación empeore.
“Esos dilemas son muy crudos, brutales, pero ya los acordaron. Los que estamos en la tercera edad tenemos que hacer conciencia de que el sistema nacional público y privado ya nos hospedaron en el corredor de la muerte, porque si nos infectamos ya estamos casi condenados”, aseguró.
Por otro lado, el historiador Lorenzo Meyer consideró que la pandemia reflejó que nadie estaba preparado, pues incluso tomó por sorpresa a los gobiernos más avanzados.
“A la larga, no sabemos hacia dónde vamos. Sabemos que hubo una cantidad de errores acumulados y que la naturaleza nos la está cobrando”, expuso.
“En México, apenas si tuvimos tiempo porque vimos a otros países, pero se hace frente a eso con un sistema de salud que se había dejado de lado desde hace tiempo, así que sobre la marcha hay que elevarlo y crear un plan general”, añadió.
Meyer planteó que la situación del Covid-19 solo se resolverá con la existencia de una vacuna.
“Antes, estamos muy a merced de lo que la pandemia y la naturaleza diga”, refirió.
“Yo estoy convencido de que esta es una situación, por un lado, no enteramente inesperada en términos de civilización; pero, por otro lado, nadie tiene la capacidad de enfrentarla como enfermedades ordinarias. Nos va a cambiar, nos está cambiando y lo que se puede hacer en algunos casos más bien, en otros más mal, es estar a la defensiva”, finalizó.