Luego de que Jair Bolsonaro se quitara el barbijo en plena conferencia para anunciar que tenía coronavirus, la Asociación de Prensa de Brasil presentó hoy una demanda penal contra el presidente brasileño ante el Supremo Tribunal Federal.
Para la asociación, Bolsonaro cometió al menos dos delitos: arriesgar de forma inminente la vida o la salud de alguien y no evitar la propagación de una enfermedad infecciosa. Las empresas de medios brasileñas decidieron que sus periodistas dejen de cubrir presencialmente a Bolsonaro y los pusieron en cuarentena hasta que den negativo por la enfermedad.
El gremio solicitó que su denuncia se envíe a la oficina del fiscal general para decidir si existen motivos para proceder con una investigación penal.
Por su parte, Bolsonaro –que actualmente está en cuarentena– dice que se siente bien y que se está medicando con un coctel de cloroquina y azitromicina. En Brasil, el número de contagios por coronavirus ya superan el 1,7 millón mientras que cerca de 68.000 personas han muerto.
Ayer, Facebook suspendió una red de cuentas de redes sociales asociadas al presidente, dos de sus hijos y asesores que, según la empresa, fueron utilizadas para difundir mensajes políticos divisivos a través de Internet.
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