La recta final de la campaña electoral para las elecciones legislativas en Argentina no tendrá en primera línea a una de sus protagonistas, Cristina Fernández de Kirchner. La exjefa de Estado y actual vicepresidenta fue sometida con éxito a una cirugía ginecológica en una clínica de Buenos Aires. La operación la obligará a guardar reposo en los próximos días, en los que la coalición gobernante busca recuperar votos de cara al 14 de noviembre para revertir, o al menos reducir, el mal resultado de las elecciones primarias de septiembre.
A Fernández de Kirchner se le realizó una histerectomía, que consiste en la extracción del útero, ovarios y trompas de Falopio. La intervención quirúrgica se programó tras haberle detectado un pólipo de endometrio, según fuentes médicas citadas por la prensa local, pero tomó por sorpresa a la ciudadanía al haberse mantenido en secreto hasta unas pocas horas antes.
“La paciente cursa un post operatorio normal, en buen estado general de salud”, detalló la clínica Otamendi en un comunicado difundido esta mañana. La vicepresidenta deberá permanecer internada al menos tres días más y una vez que reciba el alta podrá reincorporarse a sus actividades de forma gradual.
La madre de la expresidenta, Ofelia Wilhelm, se sometió en 2014 a la misma operación en el mismo centro médico de Buenos Aires. Para Fernández de Kirchner se trata de su tercera intervención quirúrgica: en 2012, en el arranque de su segunda presidencia, se le extirpó la glándula tiroidea y un año después fue operada de un hematoma subdural.
Fernández de Kirchner, al frente de la corriente peronista más numerosa dentro de la coalición de Gobierno, se puso al hombro la campaña electoral en las primarias de septiembre. Su baja médica dejará ahora solos al presidente, Alberto Fernández, y a los gobernadores provinciales que acompañan a los candidatos del Frente de Todos (FdT) al Congreso. La coalición peronista postergó su acto de cierre cinco días para intentar contar con su presencia en el palco de dirigentes y rivalizar ese mismo día con el mitin del principal partido opositor, Juntos por el Cambio (JxC).
La vicepresidenta tendrá en su mano la carta del post operatorio en caso de que decida ausentarse del escenario de derrota que auguran las encuestas el 14 de noviembre. Todos los sondeos prevén que la oposición revalidará la victoria obtenida en las primarias a nivel nacional y también en los grandes distritos electorales del país, entre ellos la provincia de Buenos Aires, el principal bastión peronista.
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En las elecciones se renovará la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado. De repetirse los resultados de las primarias -en las que JxC aventajó por casi diez puntos al FdT- el peronismo pasaría a ser la segunda minoría en la Cámara Baja y en la Cámara Alta perdería la capacidad de convocar sesiones sin necesidad de alianzas con otros partidos.
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