Si algo hay claro a raíz de la emisión de Ana en Telecinco, programa especial conducido por Santi Acosta, es que hace un mes que Ana Obregón emprendió uno de los caminos más esperanzadores de su vida. Podría decirse que el pasado mes de marzo devolvió a la presentadora una parte de las ganas de vivir que había perdido a raíz de la muerte de su hijo con la llegada al mundo de su nieta, Ana Sandra, la cual nacía por gestación subrogada. Un movimiento que generaba cierta polémica en España y que, sin embargo, ha hecho que la protagonista de Ana y los 7 se sumerja de lleno en el mundo de la maternidad al tener oportunidad de cuidar a la descendiente de Aless Lequio.
Santi Acosta en ‘Ana’. / Telecinco
Después de haberse emitido la conexión en directo con la protagonista de la década por excelencia, el presentador ha dado paso al reportaje en sí. Un trabajo periodístico que se alargó durante semanas y que comenzaba el 16 de marzo en Madrid, cuando los reporteros vieron a Ana facturando dos grandes maletas y dispuesta a poner rumbo a un destino bastante alejado de su tierra natal. Lo que nadie podía llegar a imaginar es que estas se convertirían en las últimas imágenes de Obregón en España antes de convertirse en abuela. Sin embargo, para despistar a sus seguidores, a lo largo de esa misma jornada la presentadora compartió en sus stories de Instagram unas instantáneas de la puerta de embarque de Nueva York, sin querer desvelar que realmente a donde se dirigía era a Miami.
Ana Obregón en Miami. / Telecinco
En torno a las 17:40 horas de ese mismo día, los comunicadores destinados en Miami localizan a Ana en el aeropuerto, pisando tierra firme junto a cientos de pasajeros. Un momento que resultó ser una ardua tarea para todos los periodistas para no perder de vista a su objetivo, que al día siguiente y a primera hora de la mañana salió a hacer unas compras radiante y feliz, haciéndose con un secador de mano.
Fueron más de tres días en los que los profesionales de la comunicación perdieron el rastro a la presentadora, sin embargo, el 21 de marzo a las seis de la mañana fue vista con dos grandes bolsos y con ropa blanca, situación en la que recibió una llamada que cogió con una mano en la que podía verse a la perfección la pulsera identificativa del hospital en el que nació su nieta.
Ana Obregón sujetando a su nieta. / Telecinco
Finalmente, fue el 28 de marzo cuando ¡Hola! dio la exclusiva de la década: la maternidad de Ana Obregón por gestación subrogada. Lo hizo acompañando su número semanal con unas imágenes de la madrileña sujetando al bebé en brazos mientras permanecía sentada en una silla de ruedas, siguiendo así el protocolo del hospital. Unas instantáneas en las que puede palparse la felicidad de la protagonista, esbozando una sonrisa al ver por primera vez la cara de Ana Sandra y dispuesta a iniciar una vida junto a ella.
El importante mensaje de Sandra Aladro
Como no podía ser de otra manera, este reportaje ha sido posteriormente comentado en el plató de Ana por los colaboradores allí presentes, entre los que estaba Sandra Aladro. La periodista ha desvelado algunas minucias sobre el nacimiento de Ana Sandra, como por ejemplo que se adelantó hasta tres semanas, razón por la que el seguimiento de los periodistas podría haberse llegado a extender mucho más en el tiempo. Además, la comunicadora también ha aclarado que la que fuera pareja de Alessandro Lequio no estuvo presente en el momento del parto, sino que estuvo en la habitación de al lado esperando la llamada de los profesionales médicos pertinentes.
Sandra Aladro en ‘Ana’. / Telecinco
Si algo ha querido dejar claro la propia Sandra, es que ni las hermanas de Ana ni el conde Lequio han tenido nada que ver en la consecución de esta exclusiva, por tanto no la han traicionado, tal y como se había indicado que cabía la posibilidad.
Como directora de Gtres, la agencia encargada de llevar a cabo todo el reportaje fotográfico de la maternidad de Ana Obregón por gestación subrogada, Sandra ha explicado el proceso que tuvo lugar con la revista ¡Hola! hasta que finalmente se publicó la revista, habiéndose reunido ambos equipos dos días antes del miércoles: «Decidieron que era la noticia que querían dar por encima de todas las cosas y nos informaron de que iban a hablar con ella por deferencia», concluye la colaboradora. De esta manera, aclaraba que el medio de comunicación en cuestión avisó previamente a la protagonista de la información que tenían en sus manos, para que así pudiera avisar a los seres queridos que considerara sobre la buena nueva.
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