Practicar uno de los mejores ejercicios para embarazadas está recomendado para el bienestar físico y mental de la madre y también del bebé. Por supuesto, hay que hacerlo siempre bajo supervisión médica. Muchos obstetras y ginecólogos señalan que 30 minutos de actividad física moderada tres o cuatro veces por semana tiene múltiples beneficios para la salud porque reduce el riesgo de sufrir enfermedades propias del embarazo como la diabetes gestacional.
Una de las grandes razones por las que merece la pena hacer ejercicio durante el embarazo es porque mejora el estado de ánimo y aumenta la energía. Además, en el segundo y tercer trimestre alivia en gran medida el dolor de espalda. A todo ello hay que sumar que prepara el cuerpo para el momento del parto y reduce el insomnio. Y, por último, en lo relativo al sistema circulatorio, minimiza la hinchazón de piernas y las hemorroides.
Los mejores ejercicios para embarazadas: TOP 5
Lo primero y más importante es que el médico confirme que no hay ningún tipo de contraindicación para practicar deporte. Además, debe aportar una serie de recomendaciones para hacerlo. Más allá de estas indicaciones, es importante que la mujer valore cuál es su estado físico y lo acostumbrada que está a hacer ejercicio.
Si lleva una vida sedentaria y no suele hacer demasiado deporte, hay que empezar de forma gradual, en niveles de esfuerzo muy bajos e ir poco a poco subiendo la intensidad hasta alcanzar un nivel moderado.
Si no existe riesgo para el embarazo se pueden practicar ejercicios suaves y adecuados a partir del segundo trimestre. Estos son los mejores.
Pilates
El pilates es una de las disciplinas más practicadas a nivel global, y en los últimos años el pilates para embarazadas ha ganado una gran popularidad. Ayuda a tonificar y estirar la musculatura, así como trabajar la postura, algo esencial durante la gestación. Como resulta lógico, los ejercicios deben ser suaves y de bajo impacto.
Gracias a esta disciplina aumenta la probabilidad de tener un parto sin complicaciones ya que fortalece el suelo pélvico y los músculos en general. También reduce la tensión muscular y la ansiedad, al tiempo que mejora la oxigenación.
Yoga
El yoga es junto al pilates, una de las actividades más recomendadas para mujeres embarazadas. Del mismo modo que otro tipo de clases para prepararse para el momento del parto, las clases giran en torno a tres aspectos fundamentales: la respiración localizada, la concentración mental, y el estiramiento muscular y articular.
Los beneficios del yoga para embarazadas son muchos, tanto para la futura mamá como para el bebé: mejora la calidad del sueño, reduce la ansiedad y el estrés, aumenta la resistencia y flexibilidad de los músculos necesarios para el parte, reduce el dolor de espalda y favorece la respiración.
Caminar
Caminar es uno de los ejercicios más sencillos y beneficiosos. Está al alcance de todas las mujeres embarazadas, y lo ideal es caminar 30 minutos diarios siempre y cuando el médico de el visto bueno.
Los principales beneficios de caminar son dos. Por un lado, ayuda a controlar el peso durante el embarazo sin forzar el cuerpo. La obesidad en la gestación aumenta de forma notable el riesgo de sufrir enfermedades como la hipertensión y la diabetes. Y, por otro lado, mejora la circulación sanguínea, reduciendo con ello el riesgo de formación de edemas en pies y piernas.
Natación
La natación es uno de los deportes más completos que existen. Las actividades en el agua son estupendas para mujeres embarazadas porque no pesan y vuelven a sentirse ligeras. Practicar este deporte mejora la circulación y evita la pérdida de masa muscular.
A esto hay que sumar que contrarresta la presión que recibe la espalda a medida que el vientre aumenta de tamaño. A nivel mental, la natación y el contacto con el agua hace que la futura mamá se sienta más relajada y duerma mejor.
Hidrogimnasia
Y, por último, la hidrogimnasia. Según varios estudios realizados, la gimnasia en el agua está especialmente recomendada para reducir el dolor lumbar: tranquiliza, relaja y hace que el cuerpo se mantenga en forma. Además, ayuda a mejorar la circulación. La práctica de ejercicio es mucho más suave en el agua porque la mujer no siente el peso de su vientre.
Hay tres razones por las que practicar hidrogimnasia es una gran idea: favorece la relajación, alivia los dolores lumbares, y mejora la flexibilidad y resistencia de los músculos.
Estos son los mejores ejercicios para embarazadas. Antes de hacer cualquier actividad hay que beber mucha agua, y durante la práctica conviene llevar una botella de agua para hidratarse cuando sea necesario. Hay que evitar los sobreesfuerzos y evitar aquellos ejercicios que trabajen la zona abdominal. Y, por último, siempre que sea posible hay que restablecer la rutina de la mano de un profesional.
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