En las últimas semanas, la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) ha detectado una campaña de sextorsión que emplea la técnica mail spoofing. A través de ella, los ciberdelincuentes suplantan la dirección de correo electrónico de un dominio privado del remitente con el objetivo de engañar a las víctimas y hacerles creer que han conseguido instalar un virus troyano en sus dispositivos.
Este tipo de extorsión incita a las víctimas a abonar una cantidad de dinero concreta a una cuenta monedero de Bitcoin. A cambio de ello, los estafadores prometen no publicar información íntima o privada sobre la víctima. En dicho email, el estafador explica a la víctima que, tras haber comprado credenciales a un supuesto hacker se ha hecho con sus datos, por lo que puede acceder a los dispositivos de la víctima e infectarlos con un software espía. De esta forma, consigue recabar información y grabar vídeos íntimos.
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Una vez explicada la situación, el estafador exige un pago de Bitcoin a una cuenta monedero en un plazo de 48 horas bajo la amenaza de publicar el contenido. Ante esta situación tan urgente, el usuario no analiza la situación, por lo que realiza el pago lo antes posible.
En el email también se indican los datos necesarios para hacer la transferencia del dinero solicitado, además de advertir qué acciones no debe hacer, como llamar a la Policía o solicitar ayuda. Asimismo, el ciberdelincuente asegura a la víctima que, si realiza el pago, no expondrá el contenido privado y eliminará el software espía.
Pasos a seguir si has caído en la estafa
- Si recibes el correo, elimínalo de tu bandeja de entrada y márcalo como spam.
- Si has realizado el pago, debes recoger todas las evidencias para contactar con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) y presentar una denuncia.
- Bloquea toda posible comunicación con el ciberdelincuente.
- Haz ‘egosurfing‘ para comprobar si hay información o vídeos íntimos expuestos.