El Antiguo Egipto fue una civilización muy avanzada. Dominaba la ingeniería, el arte y la arquitectura. Uno de los mejores ejemplos de su gran desarrollo son las pirámides de Egipto. Construcciones milenarias que se mantienen de pie y esconden miles de secretos.
Construidas al oeste del río Nilo
La gran mayoría de pirámides de Egipto están construidas en el lado oeste del río Nilo por una razón. Osiris era un dios que representaba la fuerza de la nueva vida, y los egipcios lo asociaban con el ciclo del sol.
El sol poniente simbolizaba la muerte ya que el sol «moría» cada noche por el oeste. De esta manera, colocando las pirámides donde descansaban los faraones a este lado, sus almas se conectaban con el sol poniente antes de iniciar el viaje a la vida eterna.
Trabajadores
Aunque siempre se ha dicho que quienes construyeron las pirámides fueron esclavos, se trata de una creencia falsa. Eran trabajadores que cobraban en especie (sal, trigo y cebada). Según se cuenta, los productos que el faraón entregaba a los obreros eran de la mejor calidad.
Pirámide de Guiza
La Gran Pirámide de Guiza es la más antigua, y la única que se mantiene en buen estado de conservación de las «7 Maravillas del Mundo Antiguo».
Tardó 20 años en construirse y es la única que tiene un pasaje de ascenso y descenso. Hasta el siglo XIV fue la construcción más alta con sus 146,62 metros de altura.
Revestimiento de caliza blanca pulida
Cuando se construyeron las pirámides de Egipto se recubrían con caliza blanca pulida. Las piedras reflejaban la luz del sol, y así las construcciones brillaban como si de una joya se tratara.
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