El dragón de Komodo es el lagarto más grande del mundo. Bien conocido por sus habilidades depredadoras, habita en la isla de Komodo, así como en determinadas zonas de Malasia e Indonesia. A continuación hemos recogido algunas de las curiosidades del dragón de Komodo más interesantes, que te encantará descubrir.
Tamaño
El dragón de Komodo es un reptil muy grande, que puede alcanzar los 3 metros de largo y los 90 kilos de peso. Aunque no arroja fuego por la boca como los dragones de los cuentos fantásticos, sí es un animal muy feroz y fuerte.
Alimentación
Los dragones de Komodo comen prácticamente de todo, aunque su alimentación se basa en animales: cabras, ciervos, cerdos, pájaros… Ocasionalmente también pueden atacar a seres humanos, aunque no es lo más común. También son caníbales, de forma que pueden comerse unos a otros, especialmente si son jóvenes.
Veneno
Como buenos depredadores, los dragones de Komodo poseen un arma infalible: su saliva. En la saliva acumulan una serie de compuestos que transmiten a la sangre de sus presas, quienes mueren envenenadas. Por lo tanto, una vez atacan a sus víctimas, esperan hasta que el veneno hace efecto para luego alimentarse de ellas.
Reproducción
La época de apareamiento del dragón de Komodo es entre los meses de mayo y agosto. En el mes de septiembre, las hembras fecundadas ponen unos 30 huevos. Los recién nacidos son indefensos y de pequeño tamaño: miden 40 centímetros y pesan 100 gramos. Por lo tanto, durante los primeros años de vida viven en lo alto de los árboles para no ser devorados por sus depreddadores.
Sentidos
El dragón de Komodo tiene unos sentidos muy desarrollados. Es capaz de ver a 300 metros de distancia, y puede rastrear cadáveres a una distancia de 10 kilómetros gracias a su extraordinario olfato.
¿Cuál de las curiosidades del dragón de Komodo te ha sorprendido más?
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