EL PAÍS

Dan Smith, experto en seguridad: “La UE es un actor geopolítico menor frente a EE UU, China y Rusia”

Dan Smith es el director del Instituto Internacional de Investigaciones para la Paz de Estocolmo (SIPRI, en sus siglas en inglés), un prestigioso centro de estudios en materia de seguridad que es referencia en múltiples ámbitos, entre ellos el análisis del gasto militar mundial, del comercio de armas o de los arsenales nucleares. En una entrevista concedida durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, Smith considera que la hipótesis más probable es que la guerra en Ucrania sea prolongada, que tendrá un alto coste humano, incluido un agravamiento de la crisis alimentaria, y que, en el gran juego global, la UE es un actor menor con respecto a EE UU, China y Rusia. En ese marco, dice, “es un error dividir el mundo entre un nosotros y ellos”.

Pregunta. En la conferencia de Múnich, muchos líderes han emitido mensajes acerca de la necesidad de prepararse para una guerra prolongada en Ucrania. ¿Cómo ve usted la perspectiva de ese conflicto?

Respuesta. Si se mira a lo que ha ocurrido en los últimos cinco meses, se ve cómo las fuerzas rusas han usado la táctica de la carne de cañón, lanzando grandes números de personas con escaso entrenamiento en el combate para desbordar las posiciones ucranias. Han logrado algún avance, lento y con alto coste humano. También se ve cómo han reforzado sus líneas de defensa en otras partes del territorio que controlan. Esto hace pensar que será muy difícil para las fuerzas ucranias abrir una brecha, incluso cuando lleguen 300 tanques, que no estarán antes de 2024. No se pueden descartar sorpresas, pero con estas premisas, se entiende por qué muchos esperan una guerra prolongada. Creo que es la perspectiva más probable. El coste humano será muy elevado. Es una pésima noticia para una amplia parte de la población mundial porque significará que los precios de los alimentos seguirán altos. Los problemas que hemos visto con el suministro de alimentos en 2022 son relativamente pequeños comparados con lo que podemos esperar más adelante en 2023 y 2024.

P. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha dicho aquí en Múnich que ahora no es tiempo de diálogo, sino el momento de intensificar la ayuda para Ucrania, pero que sí que hay que pensar cómo abordar la perspectiva de paz. ¿Cómo?

R. Al margen de los discursos públicos, en conversaciones privadas en este foro, se hace evidente que nadie ve cuál puede ser la senda hacia la paz. El trabajo de preparación tendría que ser a diferentes niveles. Uno es la relación general entre, por un lado, la UE y la OTAN, y por el otro Rusia y Bielorrusia. Cómo estos pueden coexistir. Probablemente, no podrá haber una reconciliación, pero habrá que coexistir. Otro nivel tiene que ver con la relación de Ucrania con la UE y la Alianza Atlántica. Y luego llegas al más sensible, que es lo que pueden acordar las dos partes. De momento las posiciones son profundamente incompatibles. Los países occidentales que apoyan a Ucrania no creen tener el derecho o la capacidad de empujar a Kiev hacia una negociación y nadie tiene la capacidad de empujar a Rusia a una negociación. Pensando en perspectiva, quizás EE UU y China deberían tener una discusión sobre cómo limitar los riesgos. Creo que necesitamos un esfuerzo diplomático multinivel.

P. Menciona usted EE UU y China, que se hallan en una fase de fuerte deterioro de relaciones. El discurso del máximo representante de la diplomacia china aquí en Pekín ha sido muy duro. ¿Estamos ante una nueva guerra fría?

Únete para seguir toda la actualidad y leer sin límites.

Suscríbete

R. De entrada, quiero decir que ver el mundo de una forma bipolar, con EE UU y Occidente, por un lado, y China y Rusia por el otro, es demasiado simplista. Veo la relación entre Rusia, China y EE UU más similar a un triángulo. La distancia entre el ángulo ruso y el chino es menor que la distancia entre el ruso y el estadounidense, o el chino y el estadounidense. Moscú y Pekín sí tienen una relación cercana, pero no son una unidad.

P. ¿No ve un ángulo para la UE? ¿No ve un cuadrilátero?

R. No, no lo veo. Creo que la UE es un actor importante en términos económicos, pero en términos geopolíticos globales es un actor menor. Permanecerá así hasta que decida cambiarlo. Tiene toda la capacidad económica para hacerlo. La gente no lo dice, pero la UE gasta mucho más en defensa que Rusia. Solo que es un gasto fragmentado; no es la manera más eficaz de montar una defensa europea. Si quiere montar una defensa eficaz ante Rusia, hay maneras de hacerlo que no involucren a EE UU, pero eso supondría hacer algo sobre la soberanía nacional en Europa. Así que el triángulo es lo que hay. Muchos tienden a trazar una línea recta con dos polos, pero considero que es más complejo que eso.

P. ¿Y cómo ve la relación con el sur global?

R. En Europa, y puede que en EE UU, tenemos una tendencia a esperar que otros compartan nuestra visión del mundo, que se alineen. Y esto no es tan sencillo. Creo que necesitamos ajustar un poco la actitud acerca de lo que podemos pedir a otros países. Y pienso que es, sin duda, un error intentar dividir el mundo entre un nosotros y ellos, aunque sea entre democracias y autocracias. La gente se pregunta por qué Rusia y China son exitosos en lograr respaldo de la opinión publica en África, por ejemplo. Es porque pueden compartir que han sido todos brutalizados por Occidente en algún momento de la historia.

P. Hay mucha inquietud acerca de un posible conflicto en Taiwán. China aclara que ellos quieren desarrollo pacífico, pero la tensión es alta. ¿Hay riesgo?

R. Ellos han dicho que buscan un desarrollo pacífico. Además, que si bien defenderían sus derechos con la fuerza, no forzarían la reunificación. Hay que tomar esas declaraciones en serio. China es un competidor de EE UU en muchos lugares. Pero también coopera con EE UU. Son máximos socios comerciales. Es muy diferente de la Guerra Fría; no creo que haya movimientos dramáticos.

Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.




Source link