Qué plasta que es el Black Friday. No sólo se ha convertido, según algún artículo de noticias en la “cita ineludible” de las compras pre-navideñas. ¿Ineludible? Yo creo más bien que es necesariamente eludible. Nos bombardean los que venden, pero también los que supuestamente sólo informan, con los descuentos “alucinantes” de los que podemos aprovecharnos el Viernes Negro (y tan negro) y por desgracia la semana que le precede y los días posteriores.
Es tan plasta este día que yo misma me siento obligada a hablar de él porque obviarlo sería pasar por alguien que vive fuera del mundo. Parece que si no te dejas llevar por la furia compradora eres un tonto del bote que prefiere comprar más caro. Así que me permito hablar de este día nefasto y hacerlo, por supuesto, para criticarlo. De hecho ya hemos hablado otros años en este blog del tema, en este post de Carlos Ballesteros y en este otro de Sonia Felipe Larios.
Algunos están muy interesados en vender, pero ¿significa esto que nosotros debemos comprar?
Al menos hoy yo me arrogo el derecho al pataleo. Aquí os dejo 5 consejos, muy básicos ellos, para sobrevivir a este día y a esta semana negra, semana trágica donde las haya que enlaza con el Cyber Monday. Porque los comerciales, que son muy avispados, han visto el negocio que se les venía encima y han alargado el período de “grandes descuentos” para satisfacer las ansias compradoras de los clientes, por supuesto. Como he escrito ya otras veces, algunos están muy interesados en vender, pero ¿significa esto que nosotros debemos comprar?
- Apaga el ordenador (la tablette, el móvil). Ayuna un día de toda esta publicidad invasiva que te llega por todos los canales, los medios de comunicación incluidos. Ocupa tu tiempo con la lectura en papel de un buen libro, aunque no sea rabiosa actualidad ni top ten de ventas. Pasea. Juega. Saborea un café en compañía de un amigo. Pasea la vista por la ventana. Concédeles un descanso a tus ojos y a tu mente.
- Si recibes publicidad en papel, aprovecha para decidirte a enganchar en tu buzón un adhesivo del tipo “stop publicidad”. Si aún así te llegan a las manos folletos publicitarios, ten el coraje de tal cual llegan tirarlos a la basura (al reciclaje, claro está).
- Súmate al Green Friday. La Comisión Europea junto con organizaciones de la sociedad civil española invitan los españoles a pasar del negro al verde. La campaña quiere llamar la atención sobre el derroche energético que supone el uso de electrodomésticos – productos muy demandados en estos días- y además quiere sensibilizar sobre su influencia medioambiental y sobre la necesidad de en vez de comprar, acostumbrase a reutilizar y reciclar. Más información sobre la campaña de la Comisión Europea en esta nota de la agencia EFE.
- Súmate al Día Mundial sin Compras. Se celebra al día siguiente, el 25 de noviembre, y consiste como su nombre bien indica en abstenerse de comprar durante todo el día. La idea surgió de un artista de Vancouver, Ted Dave, y desde Canadá se extendió por todo el orbe consumista.
- Vacía tus armarios antes de comprar. Si finalmente te decides a comprar algo, antes de hacerlo, piensa en deshacerte de algo que ya tengas. Vivimos acostumbrados a rellenar nuestras casas como si fueran pavos de Navidad. ¿Falta espacio? Nuevo armario, nueva estantería o más estantes hasta tocar el techo. ¿Por qué atesoramos tantas cosas de las que a menudo nos servimos muy poco? ¿Por el placer efímero de la compra, de saberlo nuestro, y al poco guardarlo en un cajón? Inspirémonos del movimiento de las tiny houses, donde menos es más. Os dejo aquí el post que escribí sobre ellas. Y pregunta retórica para concluir este texto: ¿poseemos nosotros las cosas o más bien son ellas quienes nos poseen a nosotros? He aquí el quid de la question.
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