Los lobos negros son abundantes en Norteamérica, pero no se encuentran en otras partes del mundo. Al otro lado del Atlántico, es imposible encontrar un lobo de pelaje negro.
Y aunque esto parezca un misterio, en realidad tiene una explicación perfectamente lógica, afirman los científicos. El lobo negro es un cruce de lobo y perro.
El misterio de los lobos negros
Las poblaciones de lobos (Canis lupus) tienen un pelaje de diferentes tonalidades. Los que viven en la tundra, tienen un pelo más claro, lo que les permite camuflarse entre los matorrales del entorno y evitar a otros depredadores.
Pero los lobos que habitan dentro de los bosques cuentan con un mayor número de especímenes de colores oscuros y negros, pues este es el color que les permite ocultarse en las sombras de los árboles.
La pigmentación oscura de su pelaje, conocida como melanismo, es un fenómeno de la mutación producido en el gen K. Pero aunque parezca increíble, hay una gran diferencia entre el color del pelaje entre las poblaciones de Norteamérica que las de otras partes del mundo.
La razón, según afirman los científicos, es que los lobos negros de Norteamérica son la herencia de apareamientos muy antiguos entre los lobos grises y los perros domésticos.
En el pasado, las personas criaban perros totalmente negros, llamados melánicos, lo que aumentó la abundancia de individuos de pelo negro en estas especies, que se cruzaban con los lobos grises salvajes, reforzando el melanismo en sus manadas.
Este fenómeno se da en Norteamérica más que en otras zonas, pues es allí donde se dieron los cruces. Al parecer, esta es la primera mutación genética que se ha originado en una especie de animal doméstico y se trasladó a una especie silvestre que tiene mucho en común con el perro.
Los lobos y los perros son ambos cánidos y tienen muchas similitudes. Los dos ladran y aúllan, en ocasiones esconden la comida bajo la tierra, tienen una buena visión y un excelente olfato.
Si bien estas investigaciones arrojan bastante luz sobre el asunto, los lobos negros siguen siendo un misterio, pues los expertos opinan que estas transferencias no proliferan en la naturaleza, pues el contexto natural es muy diferente al doméstico.
Es decir, esto es muy raro. Pero los lobos negros de Norteamérica al parecer adoptaron la mutación como propia, lo que explicaría el porqué de una población tan numerosa de lobos de pelaje negro y muy oscuro en esta parte del mundo.
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