Todas las mujeres amantes de una buena melena hemos tenido alguna vez la curiosidad de experimentar con los alisados, y es que tanto para las chicas con el pelo naturalmente liso como para las que lo tienen ondulado o rizado, los efectos de un alisado ¡son siempre una pasada! Descubre el tipo de alisado que va contigo.
Se nota la verdadera longitud de nuestra melena, el pelo queda mucho más brillante, adquiere un movimiento de lo más agradable y el tacto resultante es innegablemente espectacular: ¡son todo ventajas!
Aun así, es cierto que utilizar este recurso sin la debida prudencia, puede acarrear problemas para nuestra melena y es que usar demasiado la plancha ¡acaba quemando el pelo y dejándolo visiblemente sin vida!
Así que como nadie quiere eso para su cabello, lo mejor es siempre optar por una rutina de alisado que incluya las precauciones necesarias para proteger nuestro pelo o apostar por una profesional que nos asegure que nuestra melena recibirá un tratamiento con todas las garantías que además conseguirá un resultado mucho más atractivo que el que podemos obtener en casa!
Pero… ¿sabes lo que debes pedir cuando vas a la peluquería? Puesto que existen múltiples técnicas de alisado y que cada una tiene sus propias características y resultados, en el presente artículo te desvelamos las más conocidas para que puedas elegir la que mejor se adapte a ti y empieces a disfrutar en cuanto antes de los resultados que cada técnica te brinda.
Verás que las peluqueras te miran de otra forma cuando demuestres tus conocimientos en este campo y te desmarques de cualquier otra clienta cuya solicitud sea simplemente “un alisado”.
Aunque existen muchas clases de tratamientos, entre los que podemos llegar a encontrar incluso el alisado con ágave o el alisado marroquí ¡a continuación te exponemos los más comunes y efectivos!
El alisado brasileño (o alisado con keratina)
Si según muchos peluqueros, este es el mejor tipo de alisado, no es por casualidad, y es que se trata del único tratamiento que no cambia la estructura del pelo y que por lo tanto no causa el odioso efecto raíz cuando este empieza a crecer.
Si esta técnica que dura entre 3 y 6 meses es famosa por una característica, esa es el hecho de que con ella podemos eliminar 100% el encrespamiento, además de frenar la rotura del cabello y reestructurar el pelo dejándolo suave y con mucho brillo. Además, los cabellos naturalmente gruesos lo agradecen muchísimo porque lejos de apelmazarlos ¡el alisado brasileño consigue mantener su volumen!
El alisado japonés
Este técnica, que obtuvo mucho reconocimiento en los años 90 pero que ya no se aplica tanto por ser bastante agresiva con el pelo, tuvo tantísimo éxito porque sus efectos pueden llegar a permanecer entre 6 y 12 meses, aunque no es perfectamente compatible con los tintes, ya que deberíamos esperar entre 2 y 4 semanas tras teñirnos para que la coloración no sufriera ningún cambio, además del hecho que es desaconsejable tanto si tenemos el pelo estropeado (pues deberíamos someternos primero a un tratamiento de recuperación) como si hemos sometido nuestra melena a cualquier clase de decoloración, pues el pelo se podría resentir y los resultados no serían los mismos.
Cuidado porque puede resentir tu cabello y reducir los resultado notablemente.
El alisado francés
Aunque el alisado brasileño (junto al japonés) es uno de lo más famosos, este alisado que se hizo famoso gracias a la peluquera parisina Myriam K. consigue un resultado todavía más liso que el primero que hemos mencionado y es el más recomendable para los cabellos gruesos, teñidos y cuyo mayor deseo es decir adiós al frizz, pues esta técnica semipermanente que puede durar hasta 6 meses, neutraliza diversos colores como los reflejos más claros o rubios. Es otro tipo de alisado.
Lo mejor, es que lejos de ser un tratamiento agresivo, lo que conseguimos con esta técnica es hidratar el cabello y aportarle flexibilidad, lo que se traduce en un cabello más sano y además, más fácil de peinar.
El alisado fotónico
Este método, que suele durar entre 3 y 5 meses y que se sirve para su aplicación de un sistema de luz láser o azul (cuya función es la de acelerar el proceso de alisado), es un sistema muy novedoso que ha triunfado porque no utiliza productos químicos para conseguir el resultado deseado.
Además, es un tipo de alisado rápido y cómodo frente a los otros tipos de alisamiento ya comentados y conocidos ¡pues no emite ni calor ni radiaciones!
El alisado químico o ‘rebonding’
Para este tratamiento que solo se aconseja para cabellos rizados muy gruesos, sanos y que no hayan sido decolorados o teñidos en los últimos seis meses, se utilizan dos productos químicos muy agresivos que se nos presentan como una crema relajante (que penetra hasta lo más profundo de la cutícula capilar para destruir los enlaces naturales del cabello) y un neutralizante.
Como resultado, obtenemos un alisado definitivo (aunque algo frágil pues debemos evitar poner el pelo tras las orejas o llevar gafas durante los primeros días si no queremos que el efecto varíe) que puede durar hasta un año en el cabello aunque las raíces suelen necesitar retoques.