La isla de Aogashima en Japón es uno de los sitios más curiosos de la Tierra. Situada en el Mar de Filipinas, en el archipiélago de Izu y a 358 kilómetros de Tokio, este enclave se refugia en el mismísimo cráter de un volcán.
Contrariamente a lo que cabría suponer, esta isla es una de las más habitadas del archipiélago. Si bien el volcán no tiene actividad, en sus inmediaciones existe otro que sigue desprendiendo gases.
¿Te apetece conocer este lugar tan curioso de Japón? Vamos a darnos un paseo por su singular geografía.
Curiosidades de la isla de Aogashima
Una isla en donde existe no uno, sino dos volcanes parecería ser un sitio peligroso, pero este es un lugar donde acuden turistas todo el año. Es ideal para quienes buscan un sitio lejos del mundanal ruido de la ciudad, con increíbles encantos naturales.
Según los datos históricos, la última erupción del volcán de la isla de Aogashima fue en el año 1780 y provocó la muerte de la mitad de sus habitantes. El resto abandonó el lugar, la que quedó deshabitado durante 50 años.
Las únicas formas de llegar a la isla de Aogashima son en helicóptero y en barco. La frecuencia del helicóptero es de una vez al día y su capacidad es de 9 pasajeros. Frecuentemente, las condiciones meteorológicas hacen imposible el viaje.
El trayecto en barco es también difícil, pues hay varios precipicios y yacimientos de roca que hacen difícil el anclaje.
Entre las principales atracciones de la isla de Aogashima encontramos los paisajes de esta zona tropical, que hacen que este sea un lugar paradisíaco. Además, los vapores que emanan del volcán transforman las aguas en termas que se pueden disfrutar todo el año.
Existen diversas rutas de senderismo que valen la pena recorrer. Una de las curiosidades de las rutas al borde del cráter es que la temperatura del vapor caliente que emana el volcán hace posible cocinar huevos sin fuego alguno.
Otra de las atracciones de la isla de Aogashima es una planta que produce sal a partir del agua de mar, rica en minerales y calcio Kuroshio. Esta se encuentra en el borde exterior del cráter y los turistas pueden visitar el establecimiento y ver el proceso de elaboración.
La isla de Aogashima tiene todos los servicios que el turista necesita. Hay hoteles, campings, restaurantes, bares, saunas y geotérmica, así como los establecimientos de toda ciudad: oficina de correos, escuela y tiendas donde se encuentran todo tipo de productos.
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