Después de 30 meses, encuentran sin vida a Bruno Avendaño, marino desaparecido en Oaxaca

Su cuerpo fue hallado en una fosa clandestina el 12 de noviembre entre los límites de los municipios de Salina Cruz y Tehuantepec en el Istmo de Tehuantepec.

Por Diana Manzo

Tehuantepec,Oax.- Bruno Alonso Avendaño Martínez, marino activo originario de Tehuantepec, Oaxaca, volvió a su casa después de 30 meses desaparecido, solo para despedirse de sus familiares que viven en la finca Santa Teresa.

Descansa en el panteón municipal tras ser hallado por autoridades de justicia de Oaxaca en una fosa clandestina el 12 de noviembre entre los límites de los municipios de Salina Cruz y Tehuantepec en el Istmo de Tehuantepec.

El joven de 34 años de edad, era policía naval general de la Secretaría de Marina desde hacía seis años, llegó a casa el viernes 4 de mayo para disfrutar su periodo vacacional y el 10 de mayo después de trabajar en el huerto de su madre, alrededor del medio día se fue con Don Goyo, operador de un volteo amarillo Ford 1980, a cargar material de construcción de una cribadora en la Villa de San Blas Atempa, pero desapareció en una zona llamada “el manguito”.

Sus familiares aún no encuentran consuelo, para ellos es difícil haberlo encontrado sin vida y por eso siguen exigiendo justicia por su desaparición y ahora por su homicidio que aseguran fue violento.

Desde su desaparición, sus familiares, especialmente su hermano Lukas Avendaño, artista y performance zapoteca lo buscó por todos los medios y en todas partes, lo hizo a través del arte, a pie y en redes sociales.

La desaparición de Bruno le cambió la vida a su familia y también demostró la ineficiencia de las autoridades de justicia de Oaxaca, a quienes Lukas Avendaño denunció en varias ocasiones clasificándolos de indolentes e incompetencia institucional.

Para Lukas, el tener de vuelta a Bruno en su casa, es una “buena noticia” en medio del dolor que significa verlo por última vez y ahora lo que sigue es la exigencia de justicia y que las autoridades esclarezcan su homicidio y desaparición forzada como un acto de lesa humanidad.

El artista y performance reconoció el acompañamiento colectivo local e internacionalmente que tuvo él y su familia durante estos dos años y medio de búsqueda.




Source link