Un concierto de cumbia que termina a tiros con una modelo y un presunto narco asesinados en la ciudad favorita de la burguesía paraguaya, un ministro del Interior que acusa con pruebas en el Senado a un expresidente por lavar dinero propio y ajeno, y un gran ruido mediático para la destitución de la fiscal general, son algunas de las escenas que preceden a la destitución del hasta ahora ministro del Interior en Paraguay, Arnaldo Giuzzio, exsecretario antidrogas y exfiscal antidrogas, quien, según publican los medios locales, mantuvo varias reuniones con un presunto narco brasileño, del que también tomó prestada una camioneta blindada para sus vacaciones en Brasil.
Giuzzio negó las acusaciones, dijo que alquiló el vehículo y que las relaciones con el presunto narco se daban porque su empresa era una proveedora de material de seguridad.
“Yendo a Brasil (de vacaciones) tuve un desperfecto con mi vehículo. Llamé a este señor Marcus, al que conocía porque me estaba ofreciendo blindaje, chalecos y ese tipo de elementos para la protección personal (de la Policía)”, reconoció Giuzzio en declaraciones a periodistas.
“Quién no ha arrendado un vehículo en los últimos tiempos. Este fue un caso de urgencia y la opción era totalmente válida. No conocía a otra persona en ese lugar”, dijo en su defensa Giuzzio al admitir el hecho.
El exministro dijo desconocer los cargos en contra del sospechoso detenido.
“Él se presentaba como un inversionista. Tenía una próspera industria del blindaje (de vehículos) y ofrecía productos bastante novedosos, útiles para la logística de defensa personal de la Policía”.
La escandalosa noticia del nexo de Arnaldo Giuzzio con el presunto narco detenido en Brasil, Marcus Vinicius Espindola, terminó obligando a Mario Abdo Benítez a tomar la decisión de apartar a su hombre de confianza del Gabinete.
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— Última Hora (@UltimaHoracom) February 23, 2022
Giuzzio dijo que la empresa del brasileño estaba incluso autorizada por la Dirección de Material Bélico de Paraguay.
Giuzzio se convierte en el primer ministro del Gobierno de Abdo Benítez en ser destituido y uno más de los muchos representantes del Estado supuestamente vinculados al narcotráfico de una u otra forma.
Las facciones del conservador Partido Colorado que gobierna Paraguay casi ininterrumpidamente desde hace unos 70 años empiezan a pelear por quién será el próximo candidato a presidente.
El jefe de Estado nombró al asesor presidencial Federico González al frente de la cartera en reemplazo de Giuzzio.
Esta guerra interna que se reproduce cada cinco años terminó con el Congreso en llamas en el 2017 y con un joven opositor asesinado por la policía en la propia sede de su partido. ¿Qué más turbulencias vivirá este país sin mar hasta su próxima elección?
Con información de Santi Carneri, corresponsal de RFI en Paraguay