El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) dio a conocer que, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis) de 2022, las personas adultas mayores son discriminadas por su edad en la actividad laboral, así como por sus opiniones políticas y su manera de hablar.
El Consejo “subraya la necesidad de deconstruir y erradicar ideas erróneas que persisten sobre este grupo de la población, entre ellas, la falta de capacidad para la actividad laboral”, mencionó en un comunicado, a propósito del Día Nacional de las Personas Adultas Mayores.
Estableció que este tipo de discriminación, coloca a las personas en estados de mayor dependencia económica y pérdida de autonomía.
Foto: Cuartoscuro
Refirió que la Enadis muestra que dos de cada nueve personas de 18 años de edad o más, creen que es justificado negarle empleo a una persona adulta mayor por falta de capacidad para una actividad laboral.
“Asimismo, una de cada cinco en el mismo rango de edad considera que las personas mayores generalmente son una carga para su familia, mientras que una de cada ocho personas de este mismo grupo etario estaría poco o nada dispuesta a contratar a alguien mayor para trabajar en una empresa”, advierte el Conapred.
La encuesta también dio a conocer que los hombres mayores de 60 años de edad tienen 53 por ciento más posibilidades de trabajar en comparación del 21.6 por ciento de las mujeres de la misma edad.
El consejo destacó que, debido a esto, las personas adultas mayores son más dependientes de sus familiares o tutores, debido a que sus ingresos son nulos o insuficientes, aunado a que los empleos que consiguen, de algunos casos no son seguros, ni de calidad.
En ese sentido, dio a conocer que una de cada cinco personas adultas mayores trabajan en actividades elementales y de apoyo.
La encuesta también revela que dos de cada tres personas de cada 10 mayores de 60 años de edad, residen en localidades no urbanas.
Foto: Cuartoscuro
El Conapred sostuvo que a pesar de que la población mexicana es mayoritariamente joven, se deben crear espacios seguros y libres de discriminación para las personas adultas mayores, ya que en las siguientes generaciones podrían mantenerse estas formas de exclusión.
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