Ignacio Aguado tiene firmes detractores en la cúpula de Ciudadanos para ser el candidato a las elecciones del 4 de mayo en Madrid. Dirigentes de peso se han movilizado en las últimas horas para tratar de convencer a Inés Arrimadas de que apueste por otro cabeza de cartel. El exconsejero madrileño Ángel Garrido y la exdiputada de Vox Malena Contestí son dos de los nombres que promueven para sustituirle, después de que Edmundo Bal y Begoña Villacís se descarten para dar el salto. La líder apuesta de momento por Aguado, pero habrá primarias.
Inés Arrimadas tiene un frente abierto con su candidato para las elecciones de Madrid, en las que se juega quedarse fuera de la Asamblea regional. Algunos sondeos publicados en los últimos días apuntan a esa posibilidad, que sería dramática para el partido en un momento de máxima fragilidad por la crisis interna abierta tras el fiasco de la moción de censura en Murcia. Distintas voces de la ejecutiva reconocen en privado que Ignacio Aguado es un candidato que en estos momentos tiene un capital político “más bajo que la marca, que ya está tocada”, y consideran que el partido tiene que buscar alternativas a riesgo de no llegar al 5% de voto.
Aguado tiene un problema importante de “relato” para esta campaña, según comparten varios dirigentes de la ejecutiva, después de haber sido públicas y notorias sus diferencias con Isabel Díaz Ayuso. El exvicepresidente regional ha acusado a la candidata del PP de comportarse como una “pirómana”, de actuar de forma irresponsable y hasta de haber mentido, pero, sin embargo, defendió el martes en TVE que volvería a hacer presidenta a Ayuso y que pretende gobernar con ella. Ayuso, al mismo tiempo, reconoce que esa relación es imposible, porque se ha llevado “mal siempre” con Aguado, dijo el lunes.
Importantes miembros de la dirección de Cs defienden que sería mejor apostar por otro perfil de cabeza de lista, como el del exconsejero del Gobierno madrileño Ángel Garrido o el de la exdiputada crítica de Vox Malena Contestí, y así se lo han transmitido a Arrimadas. Garrido provoca dudas en otros integrantes del núcleo. “¿Y cuánto tardarían en decirnos que Garrido es un tránsfuga del PP?”, se pregunta uno de ellos. El exconsejero de Transportes, presidente de la Comunidad de Madrid entre 2018 y 2019, fue un fichaje de Cs procedente del PP. En conversación con EL PAÍS, Garrido descarta “por completo” dar un paso al frente. “No voy a presentarme a las primarias”, asegura.
El problema de la operación para sustituir a Aguado es que el partido no está sobrado de perfiles, que muchos se descartan y que Aguado pretende presentarse a las primarias. El proceso se va a poner en marcha inmediatamente y el partido quiere que esté resuelto este domingo o los primeros días de la semana que viene.
Arrimadas apuesta de momento por mantener a Aguado, según fuentes de la dirección, pero cualquier militante con seis meses de antigüedad puede presentarse a las primarias. El portavoz adjunto en el Congreso, Edmundo Bal, ha descartado este miércoles de forma tajante postularse, y lo mismo la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, según fuentes de su entorno.
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