La reducción de las restricciones en Georgia, Carolina del Sur y otros estados se da tras las protestas contra las reglas impuestas durante la pandemia.
Los gobernadores de aproximadamente media docena de estados de Estados Unidos avanzaron el martes con los planes para reabrir parcialmente la economía, pese a las advertencias de algunos funcionarios de salud de que hacerlo podría desencadenar un nuevo aumento de los casos de coronavirus.
La reducción de las restricciones en Georgia, Carolina del Sur y otros estados -en su mayoría del sur- se da tras las protestas contra las reglas impuestas durante la pandemia que cerró negocios y en gran medida confinó a los residentes a sus hogares.
Una encuesta de Reuters/Ipsos mostró que la mayoría de los estadounidenses cree que las órdenes de quedarse en casa deberían mantenerse hasta que los funcionarios de salud determinen que levantarlas es seguro, pese al daño a la economía.
“Es motivo de preocupación, toda esta idea de apertura se basa en parámetros no generados por la ciencia”, dijo a la agencia el Dr. Boris Lushniak, decano de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Maryland.
Las muertes por Covid-19, la enfermedad respiratoria causada por el coronavirus, superaron las 45 mil en todo el país y los casos pasaron los 800 mil, según un recuento de Reuters.
Nueva Jersey, Pensilvania y Michigan informaron sus cifras de muerte relacionadas al coronavirus más altas en un solo día, más de 800 entre los tres estados. El estado de Nueva York, el epicentro del brote en el país, reportó otros 481 fallecidos.
Los gobernadores están bajo presión de empresas y algunos legisladores para relajar las órdenes de quedarse en casa que han dejado sin trabajo a más de 20 millones de personas en el último mes.
Las tensiones entre el presidente republicano Donald Trump y los funcionarios locales han aumentado respecto al papel del Gobierno federal en el aumento de las pruebas, algo que los expertos en enfermedades infecciosas dicen que es necesario para permitir una reapertura segura.
Los expertos dicen que Estados Unidos, con una población de casi 330 millones de personas, debería analizar a 3 millones por semana para tener una idea precisa del alcance del virus. Los estados han examinado a un tercio de esa cifra en los últimos siete días, según el Proyecto de Seguimiento de Covid.
(Rts)