Dominique Pélicot, apodado como el ‘Monstruo de Aviñón’ y acusado de haber drogado a su mujer durante al menos una década para que decenas de individuos la violaran en su propia vivienda, ha vuelto a ausentarse este miércoles del juicio en su contra por motivos de salud después de que fuera hospitalizado el martes por problemas intestinales.
El acusado, que se ha sentado brevemente este miércoles en el banquillo de los acusados tras entrar ayudándose de un bastón, ha abandonado poco después la sala del Tribunal de Vaucluse, ha sido excusado por el tribunal y ha abandonado la sala siguiendo la petición de sus abogados.
El lunes, Pélicot tampoco declaró ante el tribunal, que ordenó entonces que se le realicen varios exámenes médicos, según informaciones de la cadena de televisión francesa BFMTV.
Sin embargo, el martes la corte dijo haber recibido varios informes sobre la salud de Pélicot, que también sufriría una posible infección urinaria, que reflejaban que su estado era compatible con su presencia en los juzgados.
Su equipo legal ha insistido en la necesidad de que se lleve a cabo un análisis forense dado que aún no ha recibido tratamiento alguno, por lo que el presidente del tribunal, Roger Arata, ha solicitado una nueva valoración de los expertos durante este miércoles.
Está previsto que vuelva a acudir a los juzgados este jueves para dar finalmente su testimonio si así se lo permite su estado de salud.
El septuagenario, que habría suministrado a su mujer, Gisèle Pelicot, ansiolíticos sin su consentimiento en aras de mantenerla inconsciente durante las agresiones, no estuvo presente a principios de semana en la vista en la que varios expertos abordaron los rasgos de su personalidad.
Del total de 51 hombres que se sientan en el banquillo por este caso, 35 han reconocido haber mantenido relaciones pero con el matiz de que no entendían que fuese un abuso no consentido, mientras que solo tres han pedido disculpas de momento.
(Europa Press)
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