Dos jóvenes disfrazados de abuelitos lograron vacunarse contra Covid-19 en la unidad del CENSIS de la Marina, ubicada en la alcaldía Coyoacán, informó la delegada estatal de los Programas de Desarrollo para el Bienestar en Ciudad de México, Cristina Cruz Cruz.
“Fueron dos chicos, uno de 30 y 35 años, los cuales utilizaron documentación de alguna otra persona, es usurpación de identidad, y ya al final del proceso de vacunación, una compañera Servidora de la Nación se dio cuenta por la voz, que no coincidía. Entonces, fue cuando se llamó a las autoridades y se está siguiendo el proceso necesario. Se denunció y están en el proceso habitual”, refirió en videoconferencia de prensa.
Incluso, dijo, fueron caracterizados porque se pintaron canas en el cabello y cejas, y se colocaron caretas para no ser reconocidos.
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Cruz indicó que el incidente ocurrió hace dos semanas, un sábado, cuando estaba por concluir la aplicación de las primeras dosis en la demarcación.
Al respecto, la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum manifestó que lo importante era evidenciar que ambos sujetos falsificaron documentos oficiales y que eso es un delito penal.
“Esa es la razón por la cual están detenidos y, obviamente, pues siguen su proceso como cualquier otra persona que haga mal uso de los documentos oficiales”, expuso. Al mismo tiempo, hizo un llamado a la población a que esperen su turno para recibir la dosis, de acuerdo a su edad.
“Los criterios que se han seguido son criterios que están establecidos para evitar enfermedad grave de la pandemia, por eso es personas mayores de 60 en adelante. En muchos otros países del mundo, fue de 65 años en adelante, aquí la decisión fue de 60 años en adelante, y ya nos corresponderá a los demás, pues en el momento en que haya suficientes vacunas”, enfatizó.
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Sobre la posibilidad de que los dos jóvenes vayan a recibir la segunda dosis de Pfizer-BioNTech que es la que se aplica en Coyoacán, la mandataria capitalina respondió entre risas “no sé”.
“Lo que quise comentar es que, en todos los casos en donde se encuentra que no se siguen los criterios que deben seguirse y, en particular si hay una falsificación de un documento, pues se trata como un delito, como cualquier delito que se cometa, sobre todo si hubo usurpación de identidad”, argumentó.
“En otros casos, pues sencillamente, si hay una persona que es funcionario público, servidor público y que por alguna razón se vacunó y no le correspondía, pues se separa del cargo, dado que ahí no hay un delito penal, pero sí consideramos que no es correcto, dado que hay una ética establecida y unas reglas establecidas, pues de que utilicen algún mecanismo para poder vacunarse”.
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