La velocidad es uno de los principales problemas para la seguridad vial en las carreteras españolas. Según datos de la DGT, uno de cada cinco accidentes con víctimas está directamente relacionado con el exceso de velocidad. Por esta razón, en los últimos años la DGT ha intensificado la vigilancia del límite de velocidad con el uso de drones.
Fue en el año 2018 cuando estos dispositivos aparecieron por primera vez. Su principal función es la de detectar no sólo el exceso de velocidad, sino cualquier tipo de conducta que suponga un peligro al volante: uso del teléfono móvil, no llevar puesto el cinturón de seguridad… Además, vigilan la circulación en los tramos donde el riesgo de accidentes es superior a la media, así como las carreteras con mayor densidad de tráfico de motoristas y ciclistas.
¿Dónde están los drones de la DGT?
En total, la DGT tiene 39 drones que operan en todo el territorio nacional. Lo más común es verlos sobrevolando las carreteras secundarias, donde más accidentes se registran. Esta es la distribución de los drones por regiones. En la lista no aparecen el País Vasco ni Cataluña porque tienen las competencias transferidas.
- Madrid: 15 drones.
- Castilla y León: 4 drones.
- Málaga: 4 drones.
- Islas Baleares: 3 drones.
- Islas Canarias: 3 drones.
- Asturias: 2 drones.
- Aragón: 2 drones.
- Extremadura: 2 drones.
- Galicia: 2 drones.
- Valencia: 2 drones.
¿Cómo funcionan los drones?
Estos drones llevan patrullando las carreteras españolas más de tres años con grandes resultados para el control por parte de la Dirección General de Tráfico.
Hay cuatro modelos diferentes que estarán vigilando las carreteras españolas durante este verano 2022. En este caso encontramos 20 modelos del SDLE V109, tres modelos del DJI M200, ocho del DJI Phantom 4 y otros ocho modelos del SDLE V105.
Para manejar un dron de la DGT son necesarias dos personas: un operador y un piloto. El operador se encarga de controlar la cámara que incorpora el dron, y el piloto lo guía de manera remota. Es requisito indispensable que ambos tengan el certificado de la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA) y pertenezcan a la DGT o a la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
Todos tienen las mismas reglas de vuelo y prácticamente las mismas características. Vuelan a 120 metros de altura y pueden alcanzar los 80 kilómetros por hora, además de estar preparados para soportar temperaturas de entre 20 y 40 grados.
Por último, en lo que respecta a las multas, cabe señalar que los drones de la DGT no ponen sanciones por sí mismos. Lo que hacen es captar y registrar la infracción a través de la cámara. Luego, es la DGT o un agente de Tráfico quien notifica al propietario del vehículo la infracción.
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