La semana pasada Andrés y Martín Ceballos, Luis Gonzalvo, Alberto González e Ignacio Gotor, componentes de Dvicio, acudieron a una cita virtual con los lectores del diario para presentar su último disco, Impulso. El encuentro estaba previsto, de manera física, para el pasado marzo, coincidiendo con el lanzamiento del álbum, pero la pandemia canceló el evento. El grupo compartió algunas de las alegrías que han experimentado gracias a este trabajo a pesar de los duros meses.
El disco estaba listo para publicarse el pasado 20 de marzo. Andrés Ceballos reconoció que “la incertidumbre” por el estallido de la crisis de la covid-19 les sembró algunas dudas sobre si retrasarlo. Concluyeron que tenían que “ser responsables” con la palabra dada a sus seguidores y no dejarse llevar por motivos puramente comerciales, así que mantuvieron la fecha. Acertaron. El álbum llegó al número 1 de ventas la primera semana y alcanzó una cifra récord para Dvicio: 100 millones de escuchas en streaming. “Fue un lanzamiento muy raro, pero es nuestro álbum favorito y todavía, meses después, tiene mucha vida”, valoró el cantante en el encuentro, que forma parte del programa de actividades exclusivas de EL PAÍS.
A ello han contribuido canciones como Capítulos, cuyo videoclip grabaron cada uno en su casa durante la cuarentena; Epiphany, en la que sorprenden con un coro en inglés, o Soy de volar, donde comparten protagonismo con la cantante argentina Lali. El videoclip oficial supera los cuatro millones de visualizaciones y contando lo divertido que fue grabarlo con la también actriz, desvelaron que en breves publicaran “el mejor videoclip” que han hecho “hasta el momento” y “con un tema que viene con colaboración”. Sin querer revelar nada más, prometieron que la espera será corta.
Con este disco, en el que han querido “arriesgar” indagando en algunos sonidos ajenos a su estilo, como el funky, cumplen siete años de carrera. Sus primeros pasos los dieron en Madrid, versionando a otros artistas. De ahí recibieron una llamada para ir a México y no se lo pensaron mucho. Serían un par de meses, pero se convirtieron en casi un año de residencia en el país americano y un disco, Justo ahora. “Fue cuando apostamos a todo por la música”, recordó Gonzalvo, pues abandonaron sus carreras y vida personal en España.
Pasaron de tocar en pequeños bares mexicanos al Teatro Metropólitan. “Ha sido todo super rápido, pero no nos consideramos unos veteranos, creo que estamos en continuo aprendizaje y desarrollo artístico”, concedió Gotor. El grupo destacó que además ha sumado algunas lecciones, como la de no dar nada por sentado. “Nos dijeron que el segundo disco [Qué tienes tú, 2017] era muy importante y nosotros pasamos un poco, estábamos muy seguros, y la verdad es que no nos fue tan bien”, asumió el guitarrista.
Redimidos con el trabajo y éxito de Impulso, solo lamentan la cancelación de la gira internacional que tenían preparada y que incluía nuevos países como Rusia. “Eso nos ha tocado muchísimo”, reconoció Gonzalvo señalando que los conciertos en streaming no son suficientes para mitigar las ganas de subirse al escenario. Serán pacientes. Aunque han aprovechado bien la cuarentena y estos meses de parón, pues ya tienen maquetados algunos temas de cara a un nuevo trabajo, Andrés Ceballos recalcó que quieren darle “el peso” que merece a este álbum y ser cautos a la hora de lanzar nuevo contenido. “Hay mucho que rascar en un disco”, remató.
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