Funcionarios ecuatorianos dijeron el lunes que los disturbios carcelarios que dejaron 79 reclusos muertos la semana pasada estaban vinculados al crimen transnacional organizado y aseguraron que la situación en el sistema penitenciario del país sigue siendo “tensa”.
Los disturbios del martes pasado, que dejaron también 19 presos heridos, fueron unos de los incidentes más sangrientos en la historia del sistema penitenciario de la nación sudamericana y evidenciaron los problemas de hacinamiento y la falta de recursos que asolaban en los últimos años al sistema.
Las autoridades inicialmente atribuyeron los disturbios a rivalidades entre bandas locales. Pero, en una comparecencia ante la Asamblea Nacional, el ministro del Interior, Patricio Pazmiño, dijo el lunes que esas rivalidades estaban vinculadas a grupos internacionales que disputan el control del narcotráfico en Ecuador.
Foto: Reuters
“No estamos hablando de la simple riña entre grupos delictivos en las cárceles”, explicó Pazmiño. “Estamos hablando de la confrontación que existe entre organizaciones criminales con contactos transnacionales por la pugna y la lucha de los mercados de la economía ilegal en el país“.
Sin nombrar grupos específico, Pazmiño añadió que las rivalidades entre grupos locales adquirieron una dimensión cada vez más internacional a partir del 2017, luego de la desmovilización del grupo rebelde de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la vecina Colombia a través de un acuerdo de paz con el gobierno de ese país.
Las autoridades reconocieron que ha habido nuevos intentos de disturbios en las cárceles desde los incidentes de la semana pasada. El más reciente tuvo lugar el lunes por la mañana en la ciudad andina de Latacunga, donde los presos tenían retenidos a cinco guardias carcelarios, pero la autoridad penitenciaria, SNAI, dijo que la situación se había controlado horas después.
“La situación sigue siendo tensa, la situación sigue siendo complicada”, dijo de su parte, Edmundo Moncayo, director del SNAI.
Las autoridades durante el fin de semana trasladaron temporalmente a algunos presos a otras instalaciones en otras provincias, debido al riesgo de que pudieran ser víctimas de actos violentos en el futuro.
El gobierno ha dicho que las cárceles están sobrepobladas en un 30% y que la falta de recursos y personal han contribuido a los enfrentamientos de los presos, que suman 38.693 en todo el país.
(Reuters)
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